Despues de la boda de Hanna, se va a Nevada junto a su esposo. Su vida era tranquila, cuando tuvo que volver a Londres. ¿Su vida seguirá siendo tranquila?.
Desperté con dolor de cabeza, tome asiento en la cama mientras tallaba levemente mis ojos, mire a mi alrededor y no era mi habitación, seguí mirando hasta que mi vista cayó en el chico que estaba a mi lado. Ahí me di cuenta de que estaba solo con bragas.
Mierda, mierda y más mierda.
- Despierta - dije pegándole al Athan con la almohada.
- ¿Qué? - susurró el adormilado.
- ¿Qué pasó anoche? - dije tomando mi celular y abrí mis ojos como plato cuando vi la hora - Mierda - dije levantándome rápido.
- ¿Qué haces? - dijo.
- Tengo una entrevista en diez minutos - dije poniéndome mi vestido.
El se levantó y se vistió rápido - Te llevo y en el camino te digo que paso - dijo mientras salíamos de la habitación.
Me entró una llamada.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- Mierda - susurré.
- Deje de maldecir, señorita - dijo Athan lo mire mal y contesté la llamada.
* Llamada *
-¿Hola? - dije bajito.
- ¡Hanna en diez minutos tienes una entrevista con Noah! - gritó Emir por el otro lado.
- Lo se... - susurré subiendo al auto.
- ¿En dónde estás? - dijo y yo apreté mis labios.
- Consígueme ropa, llegó en cinco minutos - dije colgando.
* Fin de la llamada *
- ¿Todo bien? - dijo Athan yo asentí y el siguió manejando.
- ¿Me contarás? - dije.
- Pues te traje a mi casa, tomaste demasiado, descubriste que soy actor y te lanzaste a la piscina sin ropa - dijo riendo.
- Ay, que pena - susurré escondiendo mi cara entre mis manos.
El soltó una carcajada mientras estacionaba su auto.
- Entonces... ¿No nos acostamos? - susurré aún con mi cara entre mis manos.
- No - río - Ponte esto - me puso unos lentes de sol - Y esto - me puso su sudadera - Y también esto - me puso una gorra.
- ¿Y todo esto? - dije riendo.
- Nos van a reconocer, nadie sabe que estoy aquí - dijo poniéndose una gorra y lentes de sol - Vamos.
Bajamos del auto, me abrazo por los hombros y entramos al lugar. Caminamos hasta el elevador y subimos al piso que me dijo Emir.
- ¿De qué es la entrevista? - dijo el mientras bajábamos del elevador.
