Deku: es muy grande -comentó asombrado y nervioso viendo alrededor.
Mabel: esto podría ser toda una ciudad... debo admitir que es asombroso, ¿Cómo puede haber algo así de grande en un campus? -habló detrás de el haciendo que diera un brinco del susto.
Deku: ¡M-Mabel! -viéndola- p-pensé que te habría tocado en otra arena -apenado mira al resto- ¿es que nadie está nervioso? Todos se ven tan seguros...
Mabel: bueno, la mayoría tiene algo usar su quirk, además dicen esa cursilería de que con la actitud segura y con confiar en si mismos lo lograran -rueda los ojos- da una flojera increíble, solo entraran los mejores, no las almas que confíen en sus habilidades, si tus habilidades son demasiado débiles no importa un carajo tu actitud...
Deku: -sonríe nervioso- eres tan... sincera como siempre -mira donde una castaña- es la chica de esta mañana, debería ir a agradecerle por ayudarme... -mencionó por lo bajo el peliverde para dirigirse hacia allá.
Iida: (ya veo lo que planeas, comprobaras el poder de concentración de esa chica...) -viendo a Izuku se dirigió hacia el tomándolo del hombro- ¿Quién eres tú amigo? No ibas a obstruir a tus compañeros de prueba, ¿cierto?
Deku: -tiembla ante aquello- Eek! ¿qu-quien? -un tanto asustado.
-Ese es el chico que actuaba raro desde que entró al interior...
-Es el chico que estaba temblando...
-Bueno, eso quiere decir que es un rival menos del que preocuparse ¿no?
Ante aquello por lo bajo soltaron un "qué suerte" varios haciendo que se desanimara un poco el peliverde.
Mabel: relájate un chingo wey, Midoriya es incapaz de hacer un plan malévolo para perjudicar a alguien más, no dañaría ni a una mosca -comentó a Iida.
Deku: no me ayudas en lo absoluto diciendo eso -con un aura deprimente.
Present: ¡YYYYYY EMPIEZA! -dijo haciendo que la mayoría se quedara confundidos, emitiendo un "¿huh?", mientras que la que si reaccionó fue la pelimorada que salió corriendo al interior de la ciudad falsa sin pensarlo, haciendo que varios solo la vieran- ¡¿Qué pasa?! ¡no hay tiempo en un combate de verdad! ¡vamos! ¡vaaaamos! ¡¡consideren que esto ya ha comenzado!!
-EEEHHH?! -soltaron la mayoría al mismo tiempo para salir corriendo, quien quedo al último porque no había reaccionado fue el peliverde.
Pov. Mabel:
Empecé claramente con ventaja, esos idiotas estaban tan ocupados pensando en la suerte que tenían de tener a Midoriya de oponente que ni siquiera prestaron atención a las órdenes de Present Mic, justo como era de suponerse, no están ni un poco a la altura de alguien que ha entrenado prácticamente toda su vida, apenas corrí avance al área de en medio, en poco un robot se puso frente a mi dispuesto a atacar, si no me equivocaba era uno de 3 puntos, me caía realmente como anillo al dedo, con mi habilidad para controlar el metal tan solo me concentre para comprimirlo destruyendo sus sistemas.
Mabel: 3 puntos... esto es demasiado fácil -murmuré para sonreír- quizás debería tocar los robots para que no salgan con que no saben cuántos destruí -sonriendo solo fue trepando con habilidad entre dos edificios para llegar a o alto y sentarse- (es simple... dejare que el lugar se llene y cuando los robots lleguen... será el momento de reclamar puntos)
No paso mucho para que los otros aspirantes llegaran cual estampida al lugar comenzando la búsqueda de sus puntos, cuando el área se lleno de robots me lance del edificio con toda la confianza del mundo cayendo de pie ágilmente, aunque bueno, en parte era gracias a los restos de metal que no me había hecho daño, fue entonces cuando cambie mis ojos a los de un jaguar para poder correr mucho más rápido tocando los robots, cada robot que tocaba era cada robot que se comprimía y destruía en cuestión de segundos, ya había perdido la cuenta de mis puntos, el simple placer de destruirlos me bastaba para que mi mente dejara el objetivo de lado, no paso mucho para que la tierra comenzara a temblar de repente, aquel "artilugio" del que hablaban había salido, sinceramente jamás creí que seria tan grande, ahora entendía porque salía cuando había mucha gente, todos comenzaron a correr huyendo de él, mientras yo pude visualizar a Midoriya casi paralizado.
