Marshall, Te Encontraré

No Perderemos Las Esperanzas

Mientras tanto, en la casa de los abuelos de Ryder, los cachorros se encontraban jugando en el patio trasero mientras Ryder se encuentra sentado en una hamaca viendo como los cachorros se divierten mucho jugando con sus abuelos.

Ryder: Chase, ven un momento, quiero hablar contigo

Chase: Está bien, Ryder *Se acerca a Ryder y se sienta en la hamaca junto a él*

Ryder: *Se acuesta en la hamaca*

Chase: *Se acuesta en la hamaca junto al joven rescatista*

Ryder: *Suspira* Mis abuelos me contaron lo que trataste de hacer, mi pequeño

Chase: Lamento mucho haberlo hecho, Ryder, yo estaba tan desesperado en ir a buscar a Marshall que no pensé en las cosas que pasaría

Ryder: Si no hubiera sido por el vecino de mi abuelo, tal vez tú hubieras muerto o alguien más te hubiera llevado muy lejos, no soportaría perder a otro cachorro cuando casi perdí a Rubble

Chase: Yo no soportaba tener a uno de mis hermanitos lejos de mí cuando estaba a punto de mis demás hermanos, sé que ellos se sentirían igual si me perdieran a mí *suelta una lágrima*

Ryder: *Se voltea y lo mira* Yo igual, mi pequeño, fue un milagro que Rubble esté bien *viendo al pequeño bulldog jugando con los demás cachorros* Ahora sé porque mis padres no me dijeron nada antes, y era porque no querían darme más preocupaciones de las que ya tenía, ahora más que nunca quiero encontrar a Marshall, quiero encontrar a aquel cachorro que siempre nos hace reír cuando se tropezaba, aquel cachorro que siempre estaba muy entusiasmado cuando era de elegir un cuento, aquel cachorro que tú y yo encontramos abandonado una vez, no perderé la esperanza de encontrarlo

Chase: Yo tampoco, papá, lo prometo

Ambos miran el cielo y ven como las nubes empiezan a formar la mirada sonriente que Marshall siempre llevaba cada mañana al despertar y cada noche al dormir.

Chase: *Piensa* (Te encontraremos, mi hermanito, lo prometo, no nos vamos a rendir ahora y no nos rendiremos jamás, te lo prometo, volverás muy pronto a nuestro lado y seremos una familia muy feliz otra vez, como antes, Marshall, te encontraré) *suelta una lágrima*

Ambos se quedan mirando el cielo y las nubes con la gran esperanza de que su amado dálmata regrese muy pronto a su lado en donde pertenece verdaderamente.