Incógnito

Cartas Irrelevantes

El sonido de un gaster blaster apunto de disparar advirtió al esqueleto, necesitaba moverse rápido si no quería ser lastimado.

Ink, con un movimiento de su pincel logró evadir el ataque repentino de su adverso.

Otro día más en los universos alternos.

Otro momento de calidad juntos.

—Woa! Eso fue bueno!—con calma empezó a sacudir sus prendas llenas de polvo y nieve— Esta vez casi me das—

Un muro de huesos ejerció desde el suelo, los hilos no se hicieron esperar dirigiéndose al pintor quien como podía esquivaba con pasos torpes los diversos ataques del azabache.

Así es, la destrucción y la creación luchaban por decidir el destino de un nuevo universo que había nacido hace unos pocos días atrás. De manera "amable" Error quiso darle una "cálida" bienvenido al nuevo mundo, cosa que Ink no iba a permitir.

—Has mejorado bastante!— una pincelada fue dirigida al rostro del destructor —Pero ahora es mi turno! —

—Agh! —con rapidez se limpio la pintura —Vuelves a lanzarme eso y te juro que no volverás a ver ese maldito pincel!! —

Ink no pudo evitar reír ante la furia de su rival, las peleas entre ellos no solían ser muy serias, tenían la manía de hacer reír al otro, ya sea Ink intentando presumir lo "genial" que que es terminando por atorarse en los hilos de Error o que el último nombrando se resbale por toda la pintura que hay a su alrededor.

El destructor aprovecho a que el otro esqueleto reía a carcajadas para tomarlo con sus hilos, atado el pintor dejó de reír mirando con una sonrisa al otro.

—Hay Error, ¿No pudiste esperar a que termine de reír? —

—Eres irritante—

—Bueno... Dejando eso de lado ¿Quieres ir por un café? o ¿tal vez por un chocolate caliente? —

—¡Olvida eso! Yo gané, ahora recibiré mi premio—

—¿Lo tienes que hacer ahora? Digo, estuvimos peleando por —se quedó pensando, ¿cuánto tiempo han estado en ese universo? —mucho tiempo, ¿No estás ni un poco cansado? —

Ambos se quedaron en silencio, Error miraba algo confundido al pintor por la pregunta, aunque ya debería estar acostumbrado a las preguntas espontáneas de su enemigo. Por el otro lado Ink veía divertido a su enemigo, tenía muy en claro que con esa pregunta tendría unos cuantos segundos para pensar en como escapar y poder seguir peleando.

—Si, lo haré ahora—

Extendió su falanges, posando su mano libre sobre su rostro para sacar aún más hilos, hizo un rápido movimiento con su mano, ahora el los pedazos de código del universo estaban en manos del destructor.