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(Abrazo por la espalda y muchos besos que dan vergüenza.)

((🌼))


Definido en una palabra: cansado.

Desanimado, harto, triste y con cero energías es como Beomgyu se encuentra ahora. Diferente a lo que ocurre normalmente, él tenía toda la intención de hacer grandes cosas: componer, ensayar y reír con los miembros del grupo por un largo rato. El problema está, en que todo salió al revés.

No logró ensayar porque su coreógrafa se lastimó, bueno, ocupó ese tiempo para componer algunas cosas con su guitarra y seguido irlas a entregar al letrista. ¿El problema?, que dos canciones entregadas unos días antes fueron rechazadas "porque no encajaban con el siguiente concepto". Solo enfureció más.

Rendido al ver que nada le salía, empezó a buscar por toda la instalación a su bonito novio de rubios cabellos. No estaba en ningún lado. Llamo a Yeonjun preguntando si estaba en el gimnasio con él, finalmente supo que no y mejor guardo las cosas para ir a casa. A veces lo mejor es descansar y ya mañana volver a empezar.

Y con esa idea en su bolsillo llegó al estacionamiento donde el señor Kim (el conductor a disposición de su grupo) lo llevó a su departamento compartido, agradeciendo y subiendo rápido las escaleras. No le gustaba el elevador en días pesados, sentía que se asfixiaba.

A punto de introducir las llaves una voz familiar lo detuvo.

— ¡Es que solo es bibimbap!, ¡por qué no sale! —sonrió, conocía esa voz malhumorada.

10%

— Vamos Taehyun, no te enojes —sí, era la voz que pensaba.

Delante de él (y aunque de espaldas) su menor discutiendo con el arroz y los vegetales. Era gracioso la imagen de Kang yo puedo hacer todo lo que proponga Taehyun, le había apostado que no podía cocinar bien un platillo típico en moda de broma el otro día, no esperaba que lo tomara en serio.

30%

— ¡Se acabó!, ¡me cansé! —el chiquillo había aventado los vegetales y el cuchillo al lavadero, al par que transpiraba enojado con sus manos apoyadas en la mesa pegada a la pared.

Fue ahí cuando actuó.

45%

Tratando de no hacer ruido se acercó al rubio haciendo que pegara un susto, cuando el cuerpo del mayor se pegó a su espalda abrazando su cintura y escondiendo la cabeza del lado derecho de su cuello.

— ¡Tonto! —le dio un golpe—. ¡Me asustas tarado!

— No te muevas.

Su aliento rozando al menor y haciendo que se haga tímido en dos por tres, «tan lindo» pensó y lo pegó aún más a sí.

Ambos se mantuvieron ahí, Beomgyu respirando la colonia de vainilla y madera de Taehyun; era la misma que le había comprado de regalo y que siempre se ponía. Le encantaba. Taehyun le encantaba.

Contrario al relajado mayor, Kang era como esos chocolates duros y suavecitos por dentro, que en este momento se derrite como helado en primavera. Se apenaba y Kang Taehyun no es alguien que avergüence, no, no, no...

Pero claro todo se iba al carajo cuando el mayor empezó a repartir besitos en su cuello y en el minúsculo lunar de su manzana de adán, eso lo hizo enrojecer como cereza. Una cereza bonita a los ojos de Choi.

Beomgyu sonrió saliendo de su casita, pasando los besos hasta la nuca y cabeza del rubio donde el shampoo de fresa lo hizo sonreír, buscando la mano del menor para apretarla con su zurda. De alguna manera ambos se habían encerrado en una burbuja rosa y eso hizo a Beomgyu llegar al cien en su batería personal.

Mejorando su día por completo.

— Te quiero.

— Eres un cursi.

— Y tú me quieres por eso.

— Sí... no me queda de otra.

— Mocoso yo-

— También te quiero mucho hyung.

Ahora el colorado era otro.

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Hugs and Kisses;; cbg+kthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora