Por Ti ||C.V.&TÚ||TERMINADA

35°

-¿Estás bien? Parece que no dormiste muy bien -Dice Zabdiel y yo negué

-No podía dormir, si acaso un par de horas -Dije mientras revisaba unas cosas sobre la llegada de un cargamento el día de hoy

-¿Saliste anoche? -Dijo Zabdiel y yo alcé la mirada a verlo -Te escuché entre sueños, pero no pude levantarme, supuse que si necesitabas mi ayuda, me hablarias -Dijo Zabdiel y yo solo deje salir un suspiro antes de asentir

-Solo fui a verla, no podía dormir y pensé que tal vez verla me ayudaría -Dije mientras pasaba una mano por mi cabello hacia atrás

-¿Y funcionó?

-En lo absoluto.

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Zabdiel sale de la habitación con la charola casi completa, solo se comió un pequeño tazón de fruta que acompañaba el desayuno

-¿Por qué mierdas no come? -Dije al ver la charola, Zabdiel solo se encogió de brazos

-No lo se, pregúntale -Dijo Zabdiel con gracia, él sabía que hace días ella y yo no cruzamos palabra

-Oh, claro que lo haré -Dije mientras me encamine hacia la puerta, quite los seguros y entre a la habitación, ella está al borde de la ventana, viendo la nieve caer, el invierno está intenso, ella está en una camisa mía, que apenas y la alcanza a cubrir, se puede ver a través de está el juego de lencería color azul marino -¿Me explicas la razón de por qué no comes? No es como si te estuviera dando desayuno de comedor comunitario, te estoy trayendo comida de calidad y no la comes, explica -Dije con cierta molestia, ella solo me mira por el rabillo de su ojo y me ignora, la veo cruzarse de brazos

El hecho de que me ignore de esta manera y que se crea con el derecho a jugar conmigo, me hace querer ahorcarla
Me acerco a ella con rapidez, la tomo de los hombros y la hago mirarme, veo su rostro que hace una mueca al instante y frunce el entrecejo

-Respondeme cuando te hablo -Dije molesto, pero ella solo se queda callada, me ve enojada y después sus ojos esquivan mi mirada -¿Así serán las cosas? Okey -Dije antes de soltarla, ella solo me mira a los ojos y su rostro de tranquiliza, parece asustada... Si bueno, ahora me siento el hombre más infeliz de este mundo, pero verla así me hace sentir tanto... Que sin perder más el tiempo, la pegó al cristal de la ventana, tomo su pequeño rostro entre mis manos y lo pego mis labios a los suyos, comienzo a besarla con desesperación, teniendo cuidado de no lastimarla

Ella me toma los antebrazos con fuerza, tratando de alejarle, pero mi fuerza le gana, segundos después, ella comienza a rendirse
La besó con ferocidad y siento como mis labios necesitan estar pegados a los suyos, cuando la siento segura y se que no se va a alejar, suelto su rostro, su boca me corresponde con lentitud, mis manos bajan a sus caderas y la pegó a mi, mis manos siguen bajando hasta sus glúteos, dónde acarició aquellos en círculos, ella y yo estamos perdidos en un beso tan sensual, pasional y lleno de amor

Mis manos comienzan a acariciar su silueta, le empiezo a morder los labios y ella deja salir pequeños gemidos, estos me están volviendo loco, es demasiado
Mis manos se desliza a sus muslos, acarició las caras internas de estos y mis manos comienzan a deslizarse hacia su intimidad

Pero, grave error

En cuanto mis manos la tocan, ella me lanza de golpe, me aleja y se da la vuelta con rapidez, yo solo la miro tratar de cubrirse, me siento como un imbécil justo ahora

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-Vete por favor -Dice ella y yo solo suelto un suspiro, no quiero irme, quiero quedarme con ella

-Amor...

-Por favor, si te importo un poco, vete -Dijo ella y yo asentí, me di la vuelta y me dirigí a la puerta, pero antes de salir, hablé

-Se que no me quieres ver, que estás molesta y no quieres escucharme, pero está noche vas a oírme, aunque no quieras, vas a escucharme y te haré entender lo que en verdad siento, me estás juzgando mal -Dije seriamente, ella me da la espalda y asíntio

-Hasta entonces -Dijo ella, asentí y salí de ls habitación, cerré la puerta tras de mi, coloque los seguros y me recargue sonreí está

Este momento de debilidad es lo mejor que me ha pasado en estás semanas que ella ha estado aquí, solo quiero hacerla entrar en razón, que vuelva a mis brazos y dejarnos disfrutar el uno del otro...