Una Weona entre caminantes| The Walking Dead

18- Luto.

Hey, en estos dos días pasaron cosas cuáticas, pa comenzar Rick decidió que debíamos limpiar la prisión junto con un pabellón con armas blancas, o sea cuchillos y esas cosas, todo bien hasta ahí, pudimos pasar una cómoda noche en las celdas del pabellón que limpiamos. Al siguiente día decidimos limpiar el pabellón siguiente y buscar la cafetería, tuvimos unos problemas, ya sabes, caminantes, lo usual hoy en día. Cuento corto, mordieron a Herschel en la pierna y Rick se la cortó para evitar que se convierta, encontramos un grupo de presos algo violentos y psicóticos, uno que tenía cara de weon y uno negrito chico casi nos matan, Rick los mató de manera muy sangrienta, les ayudamos a limpiar un pabellón a los dos que quedaron y nos llevamos la mitad de la comida que había.

Oh Herschel no se convirtió :D Lori y Carol lo salvaron, cuando despertó fue muy emotivo.

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Tengo mucho sueño, a Rick se le ocurrió limpiar el patio, mover los autos y despejar el área.

-¿por qué el chino y la Dora no están ayudando Rickardo?- comenté mientras bostezaba, los ronquidos de Douglas no me dejaron dormir nada, y eso que mi celda es la última.- a todo esto ¿Dónde están?-

-En la torre de vigilancia cariño.- me respondió la señora Peletier mientras me abrazaba por los hombros, la amo mierda.

-¡Glenn! ¡Maggie!- Les grito don Dixon mientras el resto nos acercábamos a la torre.

Mi amigo asiático se asomó, sin polera y abrochándose los pantalones, chico promiscuo.

-¿qué sucede amigos?-nos preguntó mientras su mujer asomaba la cabeza detrás de él, picarones.

-¿Se vienen?-les gritó Dixon, obviamente en doble sentido, le choqué los 5 por la talla tan buena que tiró.

-Enseguida vamos.- nos gritó de vuelta.

 Con Carol y Douglas teníamos la misión de mover los autos y los cadáveres, que tétrico suena lo último weon.

Rick, Glenn y Daryl iban a buscar leña fuera de la cerca. 

Te seré sincera, me levanté con ese mal presentimiento culiao otra vez, Daryl me dijo que no le hiciera caso, que era un mecanismo de alerta al estar tanto tiempo huyendo, decidí hacerle caso y ayudar en todo lo que pudiera para mejorar nuestro nuevo hogar.

Estábamos haciendo lo nuestro cuando Herschel salió junto a Lori y Carl, el viejo estaba caminando con unas muletas, como si no hubiese perdido la pierna hace un día casi.

-¡viejo hacemos una carrera!-le grité

-¡Dame unos días y te ganaré!- me respondió, era un momento agradable, me sentía feliz con mi nueva familia, habíamos llegado lejos juntos.

Todo estaba calmado, hasta que el grito de Carl alertándonos de los caminantes me sacó de mis pensamientos, rápidamente corrí hacía Lori y Carl para ponerlos a salvo, vi a Maggie correr al pabellón C y hacerme señas para ir con ella junto a Lori y Carl. 

Al entrar nos encontramos a un grupo de caminantes, tuvimos que dirigirnos a los pasillos, sorpresa, habían más, por suerte Carl encontró la sala de las calderas e ingresamos ahí, vi a Lori quejarse, por favor que no sea lo que estoy pensando...

-creo que el bebé ya viene.- dijo mientras se afirmaba en la pared.

-weon no, podemos ir a despejar el pasillo con Maggie y Carl te lleva a nuestro pabellón.-

-no resistiré Paloma, debo tenerlo aquí.- por la conchesumadre...

-y si voy por Herschel, quizá ya está despejado.-fui interrumpida por dos cosas: una molesta alarma y un grito de Lori debido a una contracción.