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ᅳ¿EN SERIO DEBEMOS HACERLO?ᅳla voz algo molesta de Milo resuena en los pasillos del lugar de competencia.
Le doy una mirada algo cansada mientras terminamos de caminar hacia las puertas dobles que nos separaban del gimnasio en donde transcurría el torneo.
Los gritos eufóricos retumban en nuestros oídos cuando ingresamos al lugar. Las competencias habían comenzado hace casi una hora, lo que significaba que habíamos llegado justo a tiempo para ver las últimas peleas.
Milo aprieta los labios con disgusto cuando comenzamos a subir las escaleras en busca de unos asientos libres. Sabía que este tipo de actividades no era de sus favoritas pero había hecho una promesa a Elliot, además, necesitábamos empezar a hacer actividades juntos y que mejor que ver una competencia de Karate.
Suelto un profundo suspiro cuando por fin nos sentamos en las gradas. Estábamos ubicados a la mitad así que nuestra vista era buena, podíamos ver la lucha mejor de lo que había pensado.
ᅳ¿Me recuerdas que hacemos aquí?ᅳ se remueve nervioso antes de sentarse junto a mi. Un escalofrío recorre sus brazos al oír como los golpes y quejidos resuenan en cada esquina del lugar.
ᅳElliot esta competiendoᅳ respondo simplemente mientras busco entre la multitud a mi amigo.
Elliot Morgan, era mi mejor amigo desde hace cuatro años. Era lo que cualquiera describiría como la persona mas atlética del mundo. Había ganado todas las carreras de su Instituto desde los 12 años y tenía uno de los futuros más prometedores en mi parecer.
Desde el momento que nos habíamos conocido me había invitado a todas sus competencias, por más pequeñas e insignificantes que sean y yo, obviamente estaba apoyando desde las gradas en cada una de ellas cada vez que tenía la oportunidad.
ᅳDeja de quejarte y miraᅳ nuestra hermana mayor señala a los adolescentes que se encontraban compitiendo ᅳPor ahi te interese lo que veasᅳ dice antes de sorber ruidosamente su bebida con la vista fija en un musculoso hombre rubio.
ᅳSi la idea de la salida era ver algo interesante, podríamos haber ido al cineᅳ cruza sus brazos observando desinteresado las peleas en el Tatami.
