Pequeña obsesión|| SoonHoon

FIN

Ya habían pasado 5 años desde que Soon había conocido a JiHoon.

Soonyoung continuo con su sueño de ser un artista, JiHoon siguió con su carrera de enfermero. En esos años juntos habían pasado tantas cosas, buenas, no tan buenas y horribles. Incluso tuvieron que llegar al punto de tener que darse un tiempo gracias a que ninguno de los dos tenia tiempo por el otro por sus trabajos, el trabajo de ambos era demandante, pero lo que le dolía a JiHoon era que después de tres años juntos Soon nunca había mencionado su relación a sus fans, entendía que las personas podrían hacer un gran escándalo por algo tan normal como el amor entre dos personas, pero eso no impedía que le doliera.

Muchas peleas, incluso una vez estuvieron a punto de golpearse, fue entonces cuando JiHoon se fue de la casa, ambos necesitaban tiempo lejos del otros, noches de llanto y soledad fue lo que ambos tenían, una enorme necesidad de ser abrazados por el otro después de un duro dia de trabajo, pero al llegar a sus casa solo tenían silencio y oscuridad, sin nadie que los esperara, solo estaban ellos, sin el otro.

Meses pasaron, ambos se dieron cuenta que no podían vivir sin el otro, volvieron y se dieron una nueva oportunidad, decidieron intentarlo y entender que la vida de Soon sería difícil para ambos y tenían que aprender a vivir con eso.

Ya habían pasado 10 años desde que la pareja había comenzado su relación y finalmente había llegado el día de la pregunta tan esperada para una pareja con tantos años juntos.

— ¿Te quieres casa conmigo?—fue todo lo que dijo Soon mientras se ponía de rodillas frente a su novio.

JiHoon estaba sorprendido, miro a los ojos a su novio, JiHoon había pensado muchas veces en hacerle esa pregunta a Soonnie pero sentía miedo de ser rechazado, ahora se había dado cuenta de que Soonyoung había esperado tanto ese día como él.

— ¿Te digo algo muy loco?—dijo JiHoon con lágrimas en los ojos. —Quería preguntarte lo mismo.

JiHoon saco de su bolsillo una pequeña caja, la abrió dejando ver un hermoso anillo en su interior.

Esa noche ambos no dejaron de sonreír ni de decir cuánto se amaban el uno al otro

Nadie habría imaginado cuanto amor podía caber en los corazones de aquellos chicos, las personas que los conocían afirmaban que no habían cambiado en tantos años juntos, decían que parecían novios y no esposos.

La vida como pareja homosexual no era nada fácil, siempre estaban en la mira de los demás y eran rechazados solo por ser "diferentes" a los demás, pero ellos prendieron a vivir con eso, no les importaba nada que no fuera el amor de ambos.

Pero, como dijimos, las cosas cambian, a veces para bien y otras....... Para mal.

—Estoy en casa. —dijo el chico cerrando la puerta.

Se sentía tan agotado física y mentalmente.

— ¿Hola?—dijo al no escuchar respuesta alguna.

Dejos las lleves en una mesa y comenzó a caminar al interior de la casa, buscando a su acompañante.

— ¿Están aquí?—dijo nervioso.

Entro a la cocina donde todo estaba oscuro.

— ¡SORPRESA!—gritaron.

—Dios, me asustaron. —afirmo él riendo un poco.

—Feliz cumpleaños, papá. —dijeron ambos pequeños corriendo a los brazos de su padre.

—No lo olvidaron. —dijo él mientras abrazaba a sus pequeñas razones de seguir adelante.

—Claro que no, sabes que él nos mataría. —respondió la niña.