Esta historia está inspirada en Alice in borderland, pero, con la única excepción de que la protagonista es un personaje inventada por mi, llamada Suki.
⚠️AVISO IMPORTANTE⚠️
Algunas cosas no serán iguales ya que quiero de alguna manera hacerla a mi...
Me encontraba en mi habitación estudiando para el examen de mañana hasta que alguien rompió mi concentración.
-Suki, mamá dice que bajes a comer- Dice Yuto, mi hermano pequeño.
-¿No te enseñaron a tocar antes de entrar?-dije con un tono de cabreo
-Perdón...- Dicho esto, se fue
Después de eso bajé detrás de mi hermano.
En la comida toda mi familia hablaba menos yo.
-Suki cariño....- Dijo mi padre con un aire de preocupación.
-Dime papá- dije seca.
- ¿Porque ya no hablas tanto? ¿Donde está la Suki sonriente?- dijo mirándome fijamente.
- Papa... esa Suki, se fue... pero eso no quita que os quiera- Dije mirándole a los ojos.
- ¿Es por ese chico verdad? Es por Nir...-
- Papá no te atrevas a pronunciar su nombre, no quiero saber nada más de ese chico- dije sin dejarle siquiera acabar
- Cariño se que le querías pero...- dijo.
- Papa, ya no le quiero, Lo odio, y dejarme de hablar de el, me voy a pasear.- dije para así levantarme e irme a mi cuarto.
Mentí, era obvio que mentí, lo seguía queriendo como el primer día que supe que me gustaba, pero me traicionó, se fue de mi vida sin ni siquiera dar explicaciones, y eso, no se lo puedo perdonar, pero por mucho que intente olvidarle nunca podré.
Estuve un par de horas más paseando hasta que decidí, por mi desgracía, entrar a un baño publico, pero al salir me di cuenta que no había nadie, asi que decidí irme a casa, y asi disculparme
Extrañamente no había nadie por la calle, y mi barrio no era de los menos poblados.
No entendía nada, ¿dónde estaba la gente? ¿Porqué los coches estaban ahí en medio como si todos se hubieran ido? ¿Realmente se habían ido?
-¿¡Hola!? ¿¡Hay alguien!?-
No había ni una sola respuesta, estaba apunto de hacerse de noche y no entendía que estaba pasando, decidí esperar en casa a ver que narices estaba ocurriendo.
Al anochecer nadie había vuelto, todo seguía igual de deshabitado que antes y me sentía demasiado sola, ni siquiera había electricidad.
Estaba en mis pensamientos cuando algo se iluminó por la ventana, era un cartel enorme en el que ponia: Jugadores, ir al terreno de juego. ¿Que mierda quería decir con eso? ¿Deberia ir?
Decidi ir, alomejor así conseguía respuestas...
Antes de ir me cambié de ropa, por alguna razón mi yo interior me dijo que tenía que ponerme algo cómodo, así que eso hice.
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