Hasta siempre

-Hasta luego vaquero- esas palabras dichas al aire mientras una triste sonrisa recorría su rostro de plastico, esas que ambos sabían eran un mero consuelo pues en realidad escondían la cruda realidad, no eran un hasta pronto, tampoco un hasta luego, eran un hasta siempre, en el momento que se separaran, ya no habría más Woody y Buzz, no más aventuras del dúo de la justicia Western Space, no más.

Tantos años juntos, entre miles de aventuras reales y de las que eran producto de la magnífica imaginación de un niño, su niño, de Andy, lo habian perdido a él, y ahora se perdían entre ambos.

-Cuidate Buzz- si ese era el adiós definitivo, ambos sabían que lo más seguro y probable es que en el momento en que ambos tomaran caminos distintos, al menos ahora en este momento, al dejarse atrás, nunca volverán a verse.

El equipo quedaba en sus manos, Buzz era ahora el líder, chocaron sus manos en un firme agarre, esa confianza que se tenían mutuamente lo hacía algo especial, jalaron el uno del otro y se abrazaron una última vez.

No más aventuras, no más juegos, no más noches mirando a Andy dormir, tampoco discusiones por tonterías, ni momentos de charlas profundas, no más bromas, no más planes, no más acuerdos...no más Woody y Buzz.

No querían soltarse, eran parte del alma del otro, un pedazo de su corazón de juguete se iría con el otro, soltarse era el comienzo de aquel desenlace doloroso.

-Cuida de ellos, serás un gran líder, Jessie cuidalo, adiós chicos- aquel movimiento de la mano del vaquero golpeando el ala de su sombrero con los dedos índice y medio aferrándose a la costura inclinando su cabeza con aquella melancólica sonrisa que resaltaba más aquel sentimiento de pérdida y final, para después apuntarlos con ambos dedos guiñando el ojo fue un golpe, una oleada de dolor por la separación, un dolor que no se podía expresar, era algo que deseaban gritar, mostrar, llorar, pero no debían hacerlo más dificil, solo debían dejarse en libertad el uno al otro para que algo nuevo comenzara para ambos, aun si dolia, aun si los desgarraba por dentro, aquello que cerraba una puerta poniendo fin a una maravillosa historia, abría otra puerta para comenzar una nueva.

-Bee Bop, cuida de Woody- Buzz miro a la ovejera que sonrió asintiendo abrazando a Woody, un dolor golpeó su pecho, rodeo a Jessie por la cintura buscando sentir algún consuelo, buscando no sentir tan grande y profundamente aquella perdida, aun tenia a los demás, pero…"JAMÁS SERÁ COMO UN WOODY Y BUZZ" grito su cabeza al tener que correr alejándose de Woody para volver a la casa rodante, vio a su amigo, a su compañero, ir quedando atrás mientras ellos se alejaban de ahí, no pudo apartar la vista aun y que ya no podía verle, había dejado atrás gran parte de su historia, parte de los mejores momentos de su vida, sus aventuras, sus alegrías y sus tristezas, había dejado ir a Woody, había dejado la mitad de su corazón en manos de Beep Bop.

-Hasta siempre viejo amigo, hasta nunca vaquero, adiós mi querido Woody- susurro con la mano en la ventana mirando el oscuro camino del exterior que lo seguía alejando mas y mas, ese era Fin...el Fin de Woody y Buzz.