Epílogo

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Hey Boy!

Era el primer fin de semana en el que Park se encontraba libre por parte de la universidad. Se despertó gracias al molesto timbre que no dejaba de sonar, bajó hasta la plata de abajo con sus ojos a medio cerrar y su pijama puesto.

—Lindos dinosaurios.

—Callate Heeseung—bufó Park frotando sus manos contra sus ojos.

—¡Hey! Más respeto que soy tu mayor—advirtió divertido.

Ni-ki hizo su aparición junto con Jay, Jake, Taki, K, quien era novio de Ej, justo atrás de la pareja estaba Jungwon quien sonreía sin motivo alguno.

—Vamos, debes arreglarte—Jay le dió un leve empujón al menor.

—¿Arreglarme? ¿Para qué?—Park preguntó claramente confundido.

—Tú solo hazlo.

[...]

—¿Alguien me puede decir que hacemos aquí?—Sunghoon preguntó mirando a su antiguo instituto.

—Ya lo sabrás, tú solo entra.

El alto miró a sus amigos con desconfianza, pero accedió a lo que estos le decían y sin reprochar nada más entró a su antiguo lugar de estudio.

Camino por los pasillos, recordando tantas cosas, recordando en su mayoría a Sunoo.

Sunoo.

Se preguntaba si ahora era feliz. Llegó hasta su antiguo salón, seguía tal y como lo recordaba, soltó una pequeña risita, casi por inercia se dirigió hacia su lugar. Se sentó en el queriendo volver a sentir la sensación que alguna vez sintió.

Elevó su vista, gran sorpresa fue para Park encontrar todas las notas que había escrito para Sunoo pegadas en la pizarra. Se levantó, caminando a paso lento, no pudo evitar caer al suelo al tan solo llegar cerca de donde se encontraban las notas.

No pudo detener las lágrimas, ni tampoco evitó recordar que era él, el culpable de todo.

Su celular vibró, lo sacó dándose cuenta de que era un mensaje de un número que no tenía agendado. Abrió la notificación, para leer el contenido del mensaje.

Número equivocado.

Da la vuelta, hyung estúpido...

—¿Qué...?

Park se dió la vuelta sintiendo como su corazón se detenía. Ahí estaba Sunoo.

Estaba ahí, justo frente a él, su cabello rubio, su piel un poco bronceada y su rostro estaba levemente maquillado dándole un toque más maduro, pero sin perder las facciones adorables que caracterizaban al menor.

—Hyung—el rubio habló, su voz era grave.

—Sunoo—susurró.

—¿Te vas a quedar ahí o me abrazaras?—de un momento a otro el aura autoritaria que tenía, se esfumó a una adorable, formó un pequeño puchero con sus labios y extendió los brazos hacia el mayor.

Park sonrió, ahí estaba, el motivo de su felicidad.

Sin esperar un solo segundo más se lanzó sobre Sunoo juntando sus cuerpos en un abrazo que ambos necesitaban.

—¡Al fin!—el resto hizo aparición gritando, grabando con su celular en el caso de Jungwon, y aplaudiendo.

[...]

El resto del día, Sunghoon decidió pasarlo junto a Sunoo. Le mostró ciertos lugares que el pequeño ya no recordaba, también otros que no conocía.

La noche estaba cayendo y decidieron tomar asiento frente al río Han. Sunghoon tomo la mano de Sunoo, el contrario le dirigió la mirada con confusión.

—Creí que nunca te volvería a ver—confesó con su vista en el río.

—Lo mismo digo—confesó el de menor estatura apoyando su cabeza en el hombro del mayor.

—Sunoo, tú ¿Aún me quieres?—mordió su labio, esperaba una respuesta negativa.

Escuchó un suspiro por parte del menor.

—Si no te quisiera aún, creo que no hubiera vuelto.

Park sonrió y sacando un pequeño papel, escribió sobre el.

Hey Boy!

Lee Sunoo ¿Me concederia el honor de aceptar ser mi novio?

El menor tomó la nota y sonrió, tomó el bolígrafo del mayor y escribió

Oh Boy!

Park Sunghoon, yo le concedo el honor de que me tenga como su novio.

Ambos rieron ante esto.

Hey Boy!

Gracias... Por volver...

Oh Boy!

Gracias, por esperarme.

Fin.

OH BOY! || SunsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora