CAPITULO 2

541 36 2
                                    

Luisita y Amelia entraron a la habitación cogidas de la mano

- Acuéstate boca abajo, te daré un masaje, te relajarás un poco

- ¿Por qué no nos vamos a dormir? Debes estar muy cansada tambien - Luisita tocó el vientre de Amelia - Luna te da mucha guerra en tu panza

- Ahora ella duerme, y entiende que su mama tiene que cuidar a su mami - Amelia besó a Luisita en la boca - Quítate la blusa y acuéstate boca abajo

Luisita escuchó a Amelia, se quitó la blusa, Amelia la miró, hace 2 meses con hacen el amor, principalmente porque Luisita tiene miedo de lastimar a la niña, Amelia le dijo muchas veces que no pasaría nada malo, pero Luisita era terca. Amelia tenia tantas ganas tocarla, besarla toda, queria sentir otra vez a Luisita muy cerca.

Amelia encendió la radio para relajarse un poco, y la canción que estaba en la radio fue muy romántica..

- Me gusta esa cancion - dijo Amelia

Si es muy hermosa, Luisita respondió

Amelia se sentó en las piernas de Luisita, comenzó a masajear su cuello

"Eres muy dura mi amor, relajate un poco", señaló Amelia.

- es que tu sabes que tengo mucho trabajo Amelia

- Me gustaría ayudarte de alguna manera

- Me ayudas sin salir de casa, no quiero que te pase nada - dijo Luisita

- No te preocupes, todo va estar bien, Luna en 3 meses va estar con nosotras - Amelia estaba masajeando el cuello de Luisita, quien sentía el mayor dolor allí

- Que rico massage - dijo , Hace 3 dias que no puedo con mi espaldas

- Trabajas duro, sé que es un proyecto muy importante para ti, pero no quiero que te enfermes - Amelia estaba preocupada por Luisita

- Tranquila Amelia, cuando termine el guión, y comenzaremos la grabación, tendré más tiempo

- ¿Y cuándo será?

- No se, tal vez 2-3 meses

- ¿Tanto? Luisita, deberías tener un segundo escritor para ayudarte

- Dije que puedo hacerlo yo misma, sabes muy bien que esta es una gran oportunidad para mí, y creo en ese proyecto

Amelia sabía que Luisita trabajaba demasiado, muy entregada a este proyecto, pero también la necesitaba en casa, la extrañaba y la necesitaba, tenía miedo de que él se alejara aún más de ella. Las manos de Amelia bajaban, comenzó a masajear las espaldas de Luisita con mucho cuidado con mucho amor

-Que rico- gimió Luisita, sintiéndose perfecta en ese momento.

En la radio ella acababa de empezar a tocar una canción que ambas conocían muy bien

- Esa canción - suspiró Amelia - ¿Recuerdas?

- Si, recuerdo las Luisa y Amelia de Plaza de los frutos, recuerdo ese dia cuando bailamos para esta canción

-Y cuando por fin volvimos- finalizó Amelia.

Luisita, ¿sabes qué me dolió más después de regresar? No es que solo me ofrecieras sexo, pero ... el día que dijiste que no me amabas mirándome a los ojos

LUNA - TEMPORADA 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora