CAPITULO 3

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Luisita estaba acostada en la cama, su rostro estaba pegado a la almohada, solo vestía su braguita, Amelia preparó música relajante, también fue al baño a cambiarse, Luisita la estaba esperando, al rato Amelia salió en camisón que hacía mucho tiempo que no usaba, afortunadamente estaba perfecta

- Ya estoy aqui - dijo saliendo del baño, Luisita levantó la cabeza, la midió con la mirada, en sus ojos se veía deseo, amor, admiración, familiaridad - ¿Cómo me veo?

-Estas preciosa Amelia- dijo Mirandola

- ¿No estoy gorda? Preguntó inmediatamente volteándose, Luisita la miró y sintió como se estaba poniendo caliente

- Estas preciosa, estas embarazada y no eres gorda amor

- Bueno, entonces estoy preparada para darte un massage - respondió mordiéndose el labio, se acercó a ella, se sentó en la cama a sus espaldas - Necesitas aclarar tu mente

- No sé si puedo - respondió Luisita - Tengo tanas cosas en la cabeza

- Espero estar en tu cabeza tambien - respondió Amelia, comenzando a masajear el cuello de Luisita - Relájate

- TU siempre estas en mi cabeza Amelia y en mi corazon - Luisita sintió el masaje perfecto de Amelia, trató de relajarse - Que maravilla

Se masajeó el cuello, apretó la espalda con los dedos, escuchó gemidos Luisita estaba bien, trató de relajarse

- Estas muy dura aqui Luisita, estas constantemente trabajando frente a la computadora

- Si lo se Amelia, pero sabes que ahora no tengo tiempo descansar

- No duermes lo suficiente Luisita, tienes que soltarte un poco, no quiero que te enfermes, te necesitamos - dijo Amelia

Luisita no respondió nada, el masaje de Amelia la hacía relajarse cada vez más, las manos de Amelia ya estaban moviendo suavemente toda su espalda Luisita, arriba y abajo

- ¿Te gusta? Amelia preguntó al escuchar a Luisita gemir

-Si me gusta mucho-respondió ella.

Demasiado - penso Luisita, sintiendo que con cada caricia Amelia se emociona cada vez más, tenía miedo de que finalmente se rindiera, de que no pudiera parar, y la más asustada por Luna no quería que le pasara nada.

Amelia estaba masajeando la espalda de Luisita y deslizándose por el trasero de Luisita, masajeándola suavemente, Luisita se abrazó más la almohada, Amelia sabía muy bien lo que estaba haciendo, sonreía con malicia, se sentaba en los muslos de Luisita, llevaba bragas pero hasta a través de las bragas se podía sentir a Amelia ella esta caliente y mojada

Amelia no me lo pone fácil, pensó Luisita.

Amelia apoyó las manos en la cama y se inclinó, besando a Luisita en el cuello

-Mmm-Luisita empezó a gemir

- Te gusto? - volvió a preguntar Amelia

- Amelia tu sabes que si pero ..

- Nada de peros - respondió mordiéndose el lóbulo de la oreja de Luisita, estaba masajeando suavemente la espalda de ella y el trasero, sus dedos cayeron al centro de Luisita, quien se lamió el labio, trató de contener sus gemidos, pero sintiendo los dedos de Amelia le costaba parar, Amelia sintió la excitación de su esposa, estaba tan mojada como ella, se volvió a sentar detras de Luisita - Ahora date la vuelta

Luisita levantó la cabeza y miró a Amelia

- ¿Fin del masaje?

-Es solo el comienzo- murmuró Amelia de una manera sexy y se lamió los labios.

Luisita se volteó y se acostó de espaldas, Amelia se excitaba cada vez más al ver a Luisita desnuda, Amelia se quitó la camisa, solo vestía bragas, Luisita podía admirar a Amelia desnuda, la vio desnuda muchas veces, pero la emocionó de la misma manera tal vez incluso más.

-Eres muy sexy Amelia-, suspiró Luisita.

Amelia miró a Luisita sus ojos, dijeron más que cualquier palabra

- Relajate carińo - Amelia comenzó a masajear los pies de Luisita, sus dedos muy suave, Luisita la miraba a ella y a Amelia cada movimiento, ella la excitaba con cada momento, los dedos de Amelia acariciaban los pies de Luisita y sus pantorrillas, finalmente comenzó a besarlos suavemente, primero se lamió los dedos. , Luisita sintió que ardía de pasión, miraba lo que hacía Amelia, pero también se emocionaba al ver a una esposa desnuda, el embarazo sumado a su encanto, dicen que cuando va a nacer una niña, una mujer es fea pero no es verdad, Amelia era una diosa, era ideal -- Te gusta ese masaje?

- Me gusta mucho - dijo Luisita, mirando a Amelia que también la miraba y besando sus pantorrillas, rodillas y muslos, se acercaba al centro de Luisita que sentía que ardía de placer - Amelia

-Que Luisita-ella la miró, Dime que quieres sentirme

- Sabes que si pero .. me da miedo - dijo Luisita

- No tengas miedo amor, Luna esta bien - Amelia no aguantó más, sus dedos entraron en el centro de Luisita - Mhmm Luisita amor estas tan deliciosa

Los dedos de Amelia aceleraban sus movimientos en Luisita, miraba a su esposa acurrucarse de placer, cuando le gritaba los dedos le daba para lamerla, la excitaba aún más cuando Luisita la miraba, se los metía en la boca, no había vuelta atrás, Luisita muy rápidamente se encontraba al lado de Amelia , se besaron, Amelia supo que es fácil excitar a Luisita, esta vez logró hacerlo, se mordieron ambos labios, lamieron y besaron

- Llegó Luisita", dijo Amelia entre besos, sintiendo la mano de Luisita tocar sus pechos.

- y Luna? Luisita todavía tenía miedo de lastimar a su hija

- Luna esta dormida, y quiere que sus mamas se cuidarán - dijo confiada Amelia, quien tomó la mano de Luisita en su mano y rápidamente la puso en su centro.

- mmm Madre mia.. mi amor  - susurró Luisita mirando a los ojos de Amelia

- Mhmm por fin, no pares - preguntó Amelia, sintiendo el movimiento de Luisita, se tocaron la frente, sintieron sus dos respiraciones, se acariciaron, Amelia también acarició a Luisita, jadeando sin poder pronunciar palabra

- Dioss - gimió Luisita, ambos estaban arrodillados uno contra el otro y moviendo sus nalgas sintiendo cada vez más excitación

Se besaron, Luisita lamió el cuello de Amelia

- estas bien? Luisita preguntó con dificultad

- Si sigue sigue !! - suplicó Amelia, sin dejar de acariciar también a Luisita

Luisita vio que a Amelia le costaba arrodillarse embarazada, pero ambas no pudieron evitar sentir que las dos llegarían pronto

-Por favor, no pares", dijo Amelia-Me voy a corr..correr".

- Ameliaa - gruñó Luisita al ver a Amelia acurrucarse de placer

Se abrazaron después de un rato, ambas alcanzaron el orgasmo, y se acostaron uno al lado del otro, aún acariciándose muy suavemente.

-Te echado de menos- dijo Amelia, besando a Luisita en los labios

- ¿Estás segura de que estás bien contigo y con Luna? Luisita estaba un poco asustada

-Si todo bien", respondió Amelia-no temas, no nos pasará nada

Luisita besó a Amelia en los labios y abrazó la barriga de Amelia, ella también la besó, Amelia acarició el cabello de Luisita

- Te quiero mucho Amelia, y te quiero a nuestra hija - dijo Luisita, levantando la cabeza mirando a los ojos de Amelia - y yo tambien te echado de menos, perdón por descuidarte que no me sentiste junto a ti , pero...

- Amor, sé que tienes mucho trabajo y que tienes miedo, pero ¿ves? No pasó nada, Luna está bien y yo ... mmhmm me siento como en el cielo contigo

- Mi princesa - Luisita y Amelia se besaron muy apasionadamente, su amor se hacía cada día más fuerte, y aunque Luisita tenía mucho miedo de que Luna pudiera lastimarse durante el hacer el amor con Amelia, hoy sabía que no había nada que temer. Amelia se durmió muy rápido mientras Luisita se levantaba de la cama, tapaba bien a Amelia y volvía a escribir el guión, que era muy importante para ella.

LUNA - TEMPORADA 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora