Una pesadilla o una triste realidad

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No sentía nada, no podía mover mis brazos ni mis piernas, trataba de despertar pero no podía, escuchaba voces pero no podía reconocer de quien o quienes eran esas voces, después de unos momentos me encontré en una campo, esto debía ser un sueno, donde yo vivía no había campos ni nada parecido, o al menos no cerca, lo raro era que escuchaba una voz  y por alguna extraña razón me era muy familiar, comencé a caminar hacia la voz, la cual me llamaba cada vez con mas intensidad.

-LUNA, mi pequeña princesa, por aquí, vamos que no nos queda mucho tiempo-

Sin dudarlo empecé a correr hacia esa voz; estos sueños me daban mucho miedo, recuerdo que los tenia con mucha frecuencia cuando era niña y me daba terror tenerlos y sobretodo la voz, la voz era lo que mas miedo me daba, pero por alguna razón esta vez no me dio miedo, mas sin en cambio me tenia muy desconcertada, escuchaba cada vez mas cerca esa voz.

Llegue hasta un pequeño rió, o al menos eso parecía, y de pronto vi como una silueta se asomaba de entre unos grandes arboles 

-Hola mi pequeña princesa, ¿cómo estas?-

-¿Eres tu, en verdad eres tu?-

Creo que debía estar muerta, por eso, la voz me sonaba tan familiar,  ese hombre que salia desde las sombras, era aquel a quien quería demasiado. Era mi padre

-¿Papá, enserio eres tu?- 

-Sí mi pequeña princesa-

-Papá, ¿porque me dejaste? ¿porque te fuiste cuando mas te necesitaba, acaso ya no me querías, acaso ya no te importaba, fui una mala hija?- no podía parar de llorar, sentía una gran hueco en mi estomago, yo sabia que mi padre no me había dejado de querer nunca por que hasta el ultimo momento de su vida se preocupo por mi y mi madre, pero lo que me duele es que cuando llego la hora de su partida no pude despedirme, ya que preferí irme con mis amigas a quedarme ese día en casa.

Mi padre me lo había pedido demasiadas veces, tal vez él ya presentía su muerte, y por eso no quería que me aparara de su lado. Fui una mala hija, y no estoy orgullosa de eso, pero cuando mi madre llamo para decirme como estaba mi papi, no pensé en nada mas que en llegar a casa y estar a su lado, pero cuando por fin llegue, el ya se había marchado, mi papi ya no estaba, cierto, estaba físicamente; su cuerpo seguía ahí, pero ya no era el, en ese momento sentí como si todo se me viniera a la mente, sentí como si mis piernas no respondieran , como si mi cerebro quisiera salirse de mi cabeza, como si mis pulmones fueran a explotar, y como si mis ojos se salieran de sus orbitas, sentía que el corazón se me salia y que no podría hacer nada para que se quedara en su lugar, una de las personas mas importantes para mi había muerto y yo no había estado ahí en ese momento con el. Creo que eso fe lo que mas me dolió, el saber que tuve una oportunidad, una oportunidad que deje pasar y que nunca mas, (por mucho que quiera), regresara.

Ese día no quise hablar con nadie, me sentía pésimo, y sentía que el no hablar con nadie ni salir de mi habitación y no hacer nada, es decir, no comer, no ir a la escuela, ni salir con mis amigos, era una buen castigo; era el castigo que me merecía.

En ese tiempo baje muchísimo de peso, ya no salia con mis amigos, ni siquiera con Richard o con Alice, ya no comía y casi ni hablaba con mi mamá, le tenia rencor por no haberme dicho antes como se encontraba mi padre, ni su condición ni si se sentía mal, nada, no había dicho nada, y hasta ahora a sigo sin saber de que murió, y realmente no quiero volver  tocar ese tema, me dolía mucho como para preguntar eso, yo sabia muy bien que mi madre no tenia la culpa de nada pero aun así le tenia un gran rencor, tal vez para no sentirme peor de como me sentía.

-Mi pequeña princesa, he venido porque veo que tienes muchos problemas- aun no podía dejar de llorar- yo se que tu sabrás la respuesta, lo único que necesitas es escuchar a tu corazón, cálmate, y piensa bien las cosas, porque si no lo haces, lastimaras a demasiadas personas, e incluso te lastimaras a ti misma, pequeña quisiera estar ahí contigo en eso momentos tan importantes para ti, para poder abrazarte, darte un beso en la mejilla e incluso golpear a esos torpes que solo hacen que llores por ellos, siendo que nadie merece tus lágrimas, y quien realmente se las merezca no te hará, llorar mi pequeña  princesa- 

-Te Amo papi, y siempre estas conmigo, siempre estas presente-

-Mi pequeña princesa, tienes que regresar, piensa bien las casas y recuerda que siempre estaré ahí contigo, recuerda que pase lo que pase todo estará bien, ahora vuelve y da lo mejor- esto fue lo único que me dijo y después de eso me dio una tipa risa que siempre daba, su sonrisa esa de esas que aunque estuvieras a punto de morir, si la veías todo era mejor, e incluso se te podían olvidar los malos raros. Amaba a mi papá y aunque no quería que se fuera, le dije que daría lo mejor y me marche.

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-Eres un idiota, juro que si algo llega a pasarle, te matare- escuchaba a lo lejos la voz de Leo, de un momento a otro me vino un dolor horrible-

-¿Que esta pasando aquí?-

-Luna- gritaron los dos 

-Estas bien pequeña Bambie- Richard se veía muy preocupado, y a lado de el estaba Leo con la misma cara de preocupación

-Si estoy bien, solo un poco adolorida-

-Eres un idiota-

-¡Para Leo!-

-Pero mi linda luna...

-Leo necesito hablar con Richard a solas-

-Luna-

-Estaré bien, ahora por favor sal de aquí y nos vemos mañana-

-Pero...

-Adiós Leo, nos vemos mañana-

Y sin decir mas, Leo salio de la casa de Richard, no sin antes darme un beso en los labios, lo cual hizo que me pusiera de color rojo como un tomate

-Richard tenemos que hablar- creo que ya tenia claro mis sentimientos 

-Te amo- dije

El me miro con una expresión de asombro en el rostro, aunque no podía definir cual era con exactitud esa expresión 

-Yo solo...

-!Espera! Por favor, no, no me digas que me ves solo como una amiga, es la peor manera de matar a alguien-

-Es que ni siquiera te considero una amiga- sentí como todo el mundo se me derribaba, no lo podía creer, eso me dolía y mucho 

-Es que yo siempre te he amado, igual o mas que tu, y no supe como reaccionar, y observando lo que paso hoy , no quiero lastimarte más, mira Luna yo tambien TE AMO pero no quiero lastimarte, por eso mismo pienso que lo mejor es dejar las cosas como estan ahora, porque te amo demasiado, y no soportaria verte lastimada, soy una bestia y aunque quiera controlarme no puedo y no se si seré capaz de hacerlo cuando este contigo, y aunque me duela pienso que estarías mejor con Santiago, yo se que el nunca te lastimara -

-Pero Richard...

-Luna será mejor que te vayas-

Me sentía tan destrozada que no supe que hacer, así que salí corriendo de su casa sin mirar atrás...

Hola hola, se que he tardado demasiado pero bueno aquí está el nuevo cap que espero les guste, y bueno ya saben que si les gusta pueden votar y/o dejar un comentario ^_^ gracias por leer :3 

¿Cómo podré olvidarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora