Capitulo 1

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"Uff!, Si no bajo de acá es capaz mi tía de bajarme a escobasos"

Ruedo los ojos ante la idea de que lo haga mi tía, la conozco y es capaz, no es mala simplemente... Tiene su estilo.

Llevo 3 cervezas y aunque no tengo los efectos secundarios del alcohol, siento que es hora de regresar a casa a hacer mis deberes, mi tía es insoportable cuando nadie hace nada y créanme la adoro pero su voz es muy chillona, en fin...

Me llamo Grecia, quizá más adelante les diga mi segundo nombre, me da flojera sólo mencionarlos sin contar que no me gusta mi nombre, es horroroso no sé cómo mis padres pudieron ponerme como mi abuela, no es tan mal pero por su culpa sufrí pequeños disturbios en el kinder.
Mi vida no es mágica como en los cuentos o libros, dónde hay príncipes y doncellas, dragones y valientes guerreros, en mi caso yo sería el "valiente guerrero" claro sin mi esquelético cuerpo, soy delgada y aunque coma demasiadas veces en un día no logro engordar, no tiene nada de malo pero tengo 17 años y parezco de 14, mi cabello es negro bueno solo una parte de él, les explico desde los 14 años me gustó teñir mi cabello de varios colores, ahora lo traigo de básicamente arcoiris, eso sí sólo la mitad me gusta me siento bien y diferente, mis ojos son negros no tengo unas pestañas preciosas, naa normal soy morena y sobre todo mi estilo black, no jaja no soy totalmente de negro pero todos los días me visto de diferentes colores, claro que la mayoría de ellos son oscuros o neutros diría mi prima Sara, aunque pensándolo bien Sara y sus colores son chillones, es todo lo contrario de mí.

Desde esta vista se puede apreciar el momento en que las luces de mi adorado pueblo Motozintla empiezan encenderse y créanme cuando les digo que es hermoso, me gusta estar acá, es un pueblo tranquilo y por lo regular siempre el clima está frío, es perfecto para alguien cómo yo; si volteo hacia atrás o al rededor se aprecian los árboles y pueblos más pequeños.
Es hora de que regrese a casa veo la hora en mi celular, 6:58 pm así es, es hora de volver, no quiero huir de mi tía.

Agarro la bolsa en que traía las cervezas y meto en ellas las botellas, tendré que dejarlo en casa del sr. Mario, es alguien bueno pero le vende alcohol a jóvenes menores como yo claro está, el Sr. Mario es recargado de una tienda está al final del pueblo pero vende de casi todo se podría llegar a mencionar que es un tipo de amigo, por supuesto no le cuento cosas de amigos" o platicar más de 10 min. Porque se duerme el señor ronda de los 50 y le dan sueño las pláticas de los jóvenes, sus palabras no las mías.
Hecho un ojo hacia el suelo, no es tan alto bueno un poco pero es fácil subir, bajar no es tan complicado además he estado varias veces aquí no es problema para mí, me impulso hacia delante caigo de rodillas

"Bueno al menos no hay espinas cómo aquella vez"

Sacudo mi cabeza de tan sólo volver a recordar aquella ocasión, un idiota cortó un árbol con espinas y las dejo tiradas ahí ,supongo que ya se imaginarán el final en fin
Emprendo mi camino realmente no camino muchos son unas 3 casas aunque al principio no hay casas, puros árboles, es bonito hay faros de luz y se ve realmente hermoso el atardecer desde acá, no saludo a nadie a los lejos veo a Gabi ese engendro vestido de angel pero es casi el mismísimo demonio, casi como yo.

- ¡Adiiii!- veo correr a Gabi hacia mí así que sólo me limito a caminar y esperar
-¿Qué pasó engendro?- suena bonito aunque mi tía diga que le debo llamar hermana,
- Tengo hambre- seguro no ha venido mi tia, la agarro de la mano y la meto directo a la cocina, le sirvo la comida y de paso cenaré de una vez, escucho que la puerta es abierta
"¿Quién será?"
Veo el cabello "rubio" si es que se le puede decir a ese intento de rubio, es Sara mi prima y toda su chispa de color de rosa

- Ah hola Grecia, hola Gabi- mi hermana solo se limita a asentir con la cabeza, no habla mucho desde, desde aquella vez.

-Sara- respondo a modo de saludo
-y mi ¿mamá?- me encojo de hombros, realmente no sé

-deberias de comunicarte más Grecia, tú intento de luto es patético- su rostro está a centímetros del mío, no siento nada respecto a sus palabras- tus padres murieron y debes trabajar porque no estarás siendo una mantenida toda tu vida a costa de mis padres-
- Sara, considera cambiar tu enjuague bucal- me gusta que se moleste siempre salgo ganando, nada me afecta ya nada lo hace.

Me mira con horror y sé que ira a su baño a sentir su olor, de sólo imaginarlo una mueca aparece en mi rostro .

Son las 9 y el engendro ya se lavo los dientes es hora de que se duerma,

-hasta mañana pequeña-
cierro la puerta y sólo dejo sus lucecitas flotantes, subo arriba de ella, bueno mi cama se encuentra arriba de ella dormimos en un pequeño cuarto y con una litera ella abajo y yo arriba se acostumbró a dormir sola no me preocupa; suelto un suspiro mañana regreso a clases, no quiero ver a mis estúpidos compañeros, menos a mis estúpidos maestros no hay algo que me motive en esa escuela para ir y sacar buenas notas mi razón está abajo durmiendo o babeando sólo espero que nada se complique terminaré el año y será para bienes lucros, no habrá nada que me impida seguir adelante a mi manera con mis reglas así que cierro los ojos y me dejó llevar por la oscuridad que habita dentro de mí.

"Sueños de Amor"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora