Asesino

OCTUBRE 20, 2014

El chico apretó el acelerador y el carro salió disparado, no era la primera vez que huía pero sí la primera vez que conducía. Las manos se le resbalaban, no sabía si era por su nerviosismo o por la sangre de la señora Star. Miraba a través del retrovisor asegurándose de que nadie lo siguiera. Pasaba de las 10 de la noche y la buena noticia era que la casa de la señora Star estaba casi en la entrada del pueblo, donde las casas eran muy escasas. La imagen de la señora Star sonriéndole apareció en su mente, ella era una buena persona y artista, los cuadros que pintaba eran increíbles, lástima que ya no pudiera terminar aquel en el que estaba trabajando. El chico recordó aquel día en el que la conoció, llevaba un vestido amarillo a la rodilla, unos tacones negros y su cabello castaño ondulado que caía por sus hombros, le parecía una mujer hermosa, alguien que no encajaba en un lugar como Strabella; se preguntó qué hacía una mujer como ella en el pueblo. Pasó una semana para que su duda fuera resuelta, la señora Star sería profesora de arte en la preparatoria del pueblo, así lo informó la directora Miller aquella tarde del viernes cuando el chico se encontraba en su última hora de clases y ésta interrumpió al profesor para dar dicho anuncio. El día lunes de la siguiente semana se presentó ante el grupo como la profesora de arte Stella Star, debido a que los horarios de los estudiantes ya estaban establecidos, las clases de arte serían consideradas un taller. Al chico le pareció una tontería que quisieran obligarlos a tomar clases de arte, se dijo a si mismo que en su lista de prioridades no entraba el arte, la defensa personal por otra parte, sería mucho mejor taller.
Una luz de automóvil puso al chico en estado de alerta de nuevo, desvaneciendo sus pensamientos. El automóvil venía en sentido contrario en la carretera principal, pasó de largo. Soltó un suspiro y continuó conduciendo. No sabía a dónde ir, solo sabía que debía alejarse y nunca volver, de lo contrario sería hombre muerto, como la señora Star. Todo pasó tan repentinamente, no tuvo tiempo de apretar el freno y salió de la carretera directo a estrellarse contra un gran árbol. Quedó inconsciente segundos después de darse cuenta de lo que había ocurrido.