Olvidó y traición (Reescrita)

Capítulo 16

Los trillizos ya tenían cinco años, a pesar de ser tan pequeños, ellos ya sabían controlar la llama de la última voluntad, vaya sorpresa sé llevo tsuna cuando sus hijos despertaron sus llamas, tsuna pensaba qué los tres tendrían las del cielo pero solo él menor su doncelito tenía la llama, él mayor tenía la llama de la niebla.

Por eso cuando le hicieron la ecografía no salia su niña ya qué el mayor la cubrió por completo, y por último pero no menos importante su niña tenía la llama de la lluvia, desde qué despertaron las llamas los arcobalenos decidieron entrenar a los pequeños, al principio tsuna se negó , pero después de un casi secuestro tsuna acepto qué entrenaran.

Los pequeños tenían conocimiento de todo hasta de quien era su papá, pero después de enterarse qué traiciono él amor de su mami, ellos empezaron a odiar a los qué lastimaron a su mama.

katashi él hijo mayor odiaba demasiado a su padre, lo aborrecía con todo su ser, bueno no sólo él si no también sus hermanos, aunque su mami les había dicho qué no lo odiaran.

(...)

-MAMI DESPIERTA, DESPIERTA,- los tres hijos de tsuna entraron corriendo a la habitación del cielo mayor, un puchero se les formo en su cara, los tres diablitos brincaron arriba de tsuna.

Tsunayoshi abrió lento sus ojos para acostumbrarse a la luz, una sonrisa se le dibujo en la cara sin qué sus niños le vieran. Él más pequeño se asusto, su mami no despertaba.

-mami se murió, lo matamos- lagrimitas salían de sus ojos grises

Los tres hermanos se asustaron quedarían sin mamá, tsuna trataba de no reir.

Los niños estaban de espalda-BUUUU- 

-KYAAAAAAA-  tsuna se moria de la risa sus hijos parecían gatos asustadizos

-mamiiiiii- tsuna picaba los pucheros de sus hijos .

-vengan vamos a desayunar- hablo tsuna, los cuatro bajaron a la cocina encontrándose a sus tíos. Él desayuno paso entre risas y una qué otra broma

(....)

Las personas se encontraban ansiosas, ya qué pronto iba abrir la cafetería favorita de todos.

La cafetería nana era una de las mejores de la ciudad, cross tenía curiosidad de esa cafetería, él quería saber porque era tan especial, así qué cuando entro lo primero que noto fue un ambiente calido y hogareño, vio qué las personas parecían felices, ojalá zero tuviera esa sensación, ahora qué sé encontraba sufriendo por su hija y kuran.

Tan metido estaba en sus pensamientos qué él dueño de esa cafetería sé le acerco.

-estas bien- podía oir un toque de preocupación en su voz.

-Eh....si no se preocupe sólo qué me quede pensando- confundido miro a la persona de enfrente.

-perdon por la indiscreción pero que le preocupa- tsuna no sabía porque pero su hiper intuición le gritaba qué ayudara al mayor.

-sólo.....estoy preocupado por mí hijo- respondió

Tsuna lo invito a pasar a su cocina para poder hablar cómodo. Cross le contó todo de zero, tsuna sólo escuchaba aveces dando su opinión.