El poema sin nombre

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Pensar, pensar, pensar.

Pensar en lo que me he de convertir,

Pensar en quien debe manejar mi camino,

Pensar en que titulo le debo poner poema,

Pensar a quien debo seguir, a quien cuidar y a quien ignorar.


Elecciones las cuales debo pensar.

La pretensión de controlar y aspirar a través de mis ojos presente es,

Ya que el ser forzado a mi protección se ve.

La intención de mi protección llevara a la desilusión de lo protegido.

En caso de que este con vida esté.


La guía de mi ser brusca es, la forma del pensar entre nosotros diferentes.

Sin embargo, un pensamiento predomina en aquel lugar.

La cueva del imaginador, perturbada por el nuevo pensamiento es.

Aun que lugar seguro para el imaginador aun es.


Incógnitas vienen y van, pero la respuesta aun no se hace presenta.

¿Por qué la duda brota como musgo y la respuesta es más ausente que el agua de un desierto?

Esta una nueva incógnita que se añade a mi lista de versos interminables.

De verso a estrofa, de estrofa a poema y de poema al corazón.


Controladores no entenderán los versos aquí expuestos,

Ya que versos libres presento en sí,

Ya que libertad anhelo hoy aquí.

Inútil es porque aun libre no se ser.

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