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-Josefina, a desayunar rapido. Ya son las 10 a.m- Sonaban los gritos de mi mamá desde la cocina. En estos 2 meses no me habia gritado, era una ocasion especial.

-Ya voy.- grite desde la cama. Me di la vuelta y mis ojos volvieron a cerrarse.

-Enserio que es difícil despertarte.- Abri mis ojos y me di vuelta. Conocia esa voz. Podria reconocer esa silueta, ese pelo negro donde sea. Era Maca estaba parada en el umbral de mi puerta.

-¿Estoy soñando?- dije medio dormida.

-Mm no creo, soy lo suficientemente real.- Me pare de la cama asi como estaba despeinada y solo con una remera grande. Fui directo hacia sus brazos y la abrace.

-Pero, ¿que haces aca?

-Dos meses extrañandote es mucho tiempo para mi- Sonrió. Extrañaba esa sonrisa, esos abrazos que me hacian sentir tan comoda.

-Tambien te extraño, a todos, ¿como van las cosas alla? - pregunte mientras tomaba unos jeans de mi placard con una remera negra lisa y me los ponia.

-Bien creo, pero sabes del protocolo, no mas de 2 meses fuera. A demas de que te extraño mas que nadie, sabes que tenes que volver.

-¿Y viniste por mi?- Me acerque a ella.

-Si tonta -Nos acercamos lo suficiente para besarnos, pero solo me toco la nariz con su dedo haciendome burla- por vos.

-Si esta bien, tengo que preparar las cosas. Mamá esta haciendo el desayuno, si queres baja y come algo.

-Ya desayune, estoy bien, pero te espero abajo.

Me sentia feliz, entusiasmada de por fin tener que volver, aunque extrañaria a mi falimia.
Arme mi bolso con las cosas esenciales. Me mire al espejo. No se si estaba lista psicológicamente para volver. En estos 2 meses hice todo lo posible para que ese nombre no cruzara mis pensamientos. Pero era lo unico que lograba pensar. Acomode mi pelo, tome el bolso y baje.

-Buen dia hija, ¿queres tostadas?

-No mamá ya nos tenemos que ir ¿no?

-Amm si creo que si- respondio Maca apoyada en el sillon.

-Ay bueno esta bien- Mamá me tomo entre sus brazos para darme un calido abrazo de despedida.- Te amo, cuidense.

-Tambien te amo mamá, y voy a volver no te deprimas.

La abrace una ultima vez y nos fuimos. Ahi estaba otra vez volviendo a Greeceward, a casa. Y con una chica distinta. Maca me hacia bien de alguna manera, no estaba segura de que eramos pero se sentia bien estar con ella. Tomamos un taxi hasta la estacion de trenes. Cuando llegamos nos dirigimos al vagón, estaba justo como lo recordaba.

-¿Lista?- me tomo la mano.

-Si, lista.- Subimos y a los 2 minutos nos encontramos en las grandes puertas de Greeceward. Maca abrio por mi. Una emocion recorrio todo mi cuerpo, estaba feliz, emocionada de volver. Entramos y todo parecia como lo recordaba. Calido y con olor a madera.

-Bueno bienvenida de nuevo.- seguiamos de la mano.- Creo que tenes que acomodarte y demas, voy a estar en el campo con el arco y flecha ¿si?- me dio un tierno beso en la mejilla- descansa si lo necesitas.

-Maca- la tome del brazo y se dio vuelta- Gracias- Me sonrió y se fue.

Me dirigi al ascensor de siempre, subi al tercer piso y vi la puerta de mi habitacion. Miles de recuerdos se me vinieron encima. La puerta se abrio de golpe. Era Clari, vestia de negro, parecia que iba a entrenar. Su cabello estaba corto casi por los hombros. Estaba distinta, pero igual de hermosa que siempre.

𝖘𝖊𝖒𝖎𝖉𝖎𝖔𝖘𝖆 // terminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora