9

50 3 0
                                    

Eran las 9 a.m, mañana me iba. Hoy era el baile. Cuando abrí los ojos Clari estaba en ropa interior intentando ponerse un brallete rosa sin ayuda. Trate de pensar lo mas frio que pude. Tenia un cuerpo estilizado, era delgada con la cintura marcada. Me pare de la cama, un poco mareada por hacerlo del golpe, siempre me pasaba lo mismo.

- ¿Necesitas ayuda? - Pregunte.

-Si porfa y buen día.

La ayude a abrocharse el top. Su piel era suave, tenia la tez blanca y pecas no solo en la cara, tenia en la mayoría del cuerpo, pero no muy definidas.

- Gracias- Dijo mientras se ponía una pollera blanca algo corta pero delicada.- Voy a desayunar.- Salió por la puerta y la cerro.

Entre a ducharme. Sali y luego baje a desayunar. Casi todos estaban ahí, visualice a Maca en el medio de la gente. Ella me vio y me hizo una seña para que me fuera a sentar a su lado. ¿Por que no? Clarissa se había sentado con Percy, después de lo de ayer, un desayuno iba a ser incomodo. Me dirigí al lado de Maca y me senté. 

Tenia sus cabellos negros atados en una colita y vestía una musculosa negra algo escotada con un jean. De verdad no se como hacían todas para estar recién levantadas y tan hermosas y arregladas.

-Hey, buen día- dijo con una sonrisa.

-Buen día, ¿hay café?

-Si, ahí esta. - me respondió sirviéndome el café en una taza. -¿ Ya sabes que te vas a poner hoy?

- Si algo así, ¿vos?

-Mm no estoy 100% segura, ¿Qué color vas a llevar? me gusta estar combinada.

-Negro, es clásico así que podes combinarlo con lo que quieras.

-Me la haces fácil, gracias.- Siempre parecía que hablaba con una voz seductora, pero determinada.

-Maca, ¿podemos hablar un segundo?- Era Clarissa, no se porque necesitaban hablar pero Clari no se escuchaba feliz o con su tono dulce de siempre, sonaba enojada.

Maca dio un suspiro en forma de queja, se paro y le sonrió falsamente, Salieron del comedor.

Narra Maca

Años, años discutiendo con esta mujer. La famosa hija de Afrodita, se me era insoportable. Podia matarte pero seguiria teniendo esa voz dulce y encantadora. La envidia es mala, pero no era envidia, ella me molestaba. Me llevo a la biblioteca.

-¿Que?- Dije harta de ella antes de que empezara a hablar.

- ¿Por que ella? ¿Qué no tenias otra chica o chico con que quieras estar? Ya pasamos por esto.

- ¿De verdad siempre te vas quejar-me acerque a ella intimidante- de todo lo que hago?

- No te acerques a Josefina.

-"Ni ti icirquis i Jisifini", ¿O que? ¿Qué vas a hacer me vas enamorar? Siempre igual, te di a Percy, sabias que yo lo ame, que estaba enamorada de el. Pero no, le tuviste que llenar la cabeza porque sos hija de Afrodita y yo de Hades ¿no? ¿Por que te sentís tan intimidada? 

- No me siento intimidada, ella no es para vos.

- ¿Y para vos si? - La empuje y me fui.

Narra Josefina

Maca volvio a la mesa, ya habiamos terminado de desayunar. Parecia enojada.

- ¿Esta todo bien? - prengunte.

- No, tu chiquita tuvo un ataque de celos por vernos juntas.

- Clari y yo no somos nada mas que amigas.

𝖘𝖊𝖒𝖎𝖉𝖎𝖔𝖘𝖆 // terminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora