Maquinas Perfectas (Versión Chico)

CAPITULO 1: Conociendo la historia...

-No me dejes!! Por favor!! Quédate, te necesito...-Le dije con lágrimas en los ojos sosteniendo su cuerpo inmóvil-

-Alex déjala! Debemos irnos o nos atraparan!-

La casa se estaba incendiando, había disparos a fuera de la casa, nos tenían rodeados, ya no había salida...

Tranquila, debes estar pensando "¿De que rayos habla este sujeto?" acabas de llegar y ya murió alguien, debes estar hecha un lio, bueno regresando un poco atrás, te explico, es el año 3000 y las personas que se revelan ante nuestros líderes son cambiadas por maquinas, que loco no? Poco a poco te iré explicando las reglas para que sobrevivas, toda buena historia tiene a su protagonista y ese soy yo, Alex, y no es que me quiera dar aires de grandeza claro que no, es solo que yo viví esta historia en carne propia, pero bueno, ¿Por dónde se empieza algo? Exacto! Por el principio y ahí es donde comenzaremos, contándoles la Historia de Alexander...

*Martes 01 de Enero del año 3000, 6:30 de la mañana*
-Alexander tienes 15 minutos para estar listo o me vas a conocer!!- Exclamo mi mamá con su tierna voz, abriendo las cortinas violentamente dejándome incapaz de ver algo por unos segundos, ¿No crees que es un amor? No me respondas...-Argh! -Grite quejándome por la luz- Ya voy mamá, tranquila, estaré listo en 10- le dije con una sonrisa, y ella me regreso el gesto. Desde que tengo uso de razón entendí que solo seríamos mi madre y yo, desde que mi padre dijo que iría a "Conseguir un trabajo" y jamás volvió, vaya padre no? Desde ahí me prometí no ser igual a él y ser el hombre de la casa, en cuanto tuve la edad suficiente empecé a trabajar en una cafetería para ayudar a mi madre.

Decidí apresurarme, ya que no es bueno poner a mi mamá de malas, me puse una camisa blanca estampada, sudadera negra, pantalón de mezclilla y tenis negros, jamás usaré tenis blancos, es odioso cuando están recién lavados y no falta quien te pise, en fin, tome mi mochila y baje a desayunar con mi mamá

–Estoy listo! -Le dije tomando una manzana-

-Me alegra que te tomaras el tiempo de bajar a desayunar con los mortales –Me dijo con una sonrisa burlona-

La relación con mi madre era increíble, bromeábamos, veíamos películas juntos, nos contamos todo, ella es mi soporte y yo soy el suyo...

-Hoy saldré un rato con los chicos después del trabajo- Vi su cara de preocupación, tanto ella como yo sabemos que hay toque de queda a partir de las 8, nadie sale, nadie entra y a los que atrapan no vuelven a ser los mismos

-Solo regresa a tiempo, no quiero tener que estarte llamando- Me dijo tranquilamente

-Gracias! No te preocupes, regresare antes- Le dije despidiéndome de ella y tomando mis cosas para dirigirme al trabajo sintiendo un mal presentimiento que decidí ignorar.

-Sentiste eso? o solo a mi se me erizo la piel...