It's okay

Capítulo 3

-No necesito un estúpido vestido, además, ¿qué cosas dices? Por Dios Ema, sabes que no puedo soportar la idea de tener que verlo todos los días. –Digo y es verdad, a veces pienso como puedo llegar a odiarlo tanto, luego me acuerdo que es un idiota arrogante que le gusta jugar con las chicas y se me pasa.

-¿Sabes? Yo no puedo soportar la idea de que no quieras aceptar que estas locamente enamorada de él. ¿Y sabes qué? Cuando te des cuenta de eso será tarde, y ahí es cuando diré el gran "te lo dije"-Me respondió con esa enorme sonrisa de "estoy orgullosa por lo que acabo de decir" que solo los Wilk saben hacer. Obviamente he quedado boquiabierta  y sin responder, y normalmente soy yo la que siempre tiene la última palabra.

-Ugh, adiós, me voy a la cama. – No tengo ganas de aguantar las estupideces que Ema dice, solo me iré a la cama y esperaré a que mañana sea un buen día, solo pido eso.

*****
Narra Elena

Suena la alarma justo a las 6:00 am y maldita sea, debo levantarme, siento que no he dormido nada y, realmente, ayer ha sido un día estresante. Me levanto y tomo una ducha de 20 minutos, hago la rutina de todos los días y me cambio,  esta vez iré con unos jeans ajustados, unas vans, una remera negra al cuerpo y mi gorro preferido, lo uso cuando solo estoy de buen humor, y lo sé, se que parezco un manojo de nervios pero no lo soy, la gente que realmente me conoce -(y a decir verdad, no mucha)- sabe cómo soy.

Llego al instituto y me encuentro con mis hermanos, los gemelos me han invitado a almorzar hoy y en verdad, en verdad no quiero ir si va a estar Noah allí, hoy necesito estar en paz. Pero no dejaré que arruine mi día.

Toca la campana y entro a mate, "mierda", digo por dentro, se que Noah está en esta clase.

"Deja de centrarte en él, estúpida, tienes una vida" –Dice mi subconsciente, algo ruda, pero es la verdad.

Entra la maestra y detrás de ella Noah, llegan bastante tarde y por un momento cruza por mi mente la idea de que Noah ha estado liando con la profesora, eso sería tan raro y estúpido, pero no es la primera vez que pasa, cada día odio más a este chico, pienso.

Se acerca y se sienta en un banco detrás de mí, mirándome con esa cara de arrogante que tiene, sé que él sabe que yo se algo, es inteligente, pero sigue siendo un idiota.

-¿Eres Lena, verdad? Tus hermanos me han dicho que recuerdes ir con ellos para el almuerzo, y por cierto, soy Noah, amigo de ellos. –Claro está, nunca falta su sonrisa de hipócrita, y el hecho de que no supiera quién soy, me molesta un poco, creo. ¿A quién le miento? Me hace enfurecer, y que me haya dicho "Lena", lo hace más. Por Dios, quién se cree que es.

-¡Claro!–Lo digo tan falsamente, con mi sonrisa de hipócrita, Dios, parezco Ema.

Narra Noah

 

-¿Eres Lena, verdad? Tus hermanos me han dicho que recuerdes ir con ellos para el almuerzo, y por cierto, soy Noah, amigo de ellos. – Le digo. Y la verdad es que se malditamente quién es. Cómo no iba a saberlo. No se por qué actúo así a veces, soy un idiota. Un maldito idiota.

-¡Claro!- Me contesta, y de verdad pienso que soy un idiota, cada día más. Mierda, no puedo esperar para salir de aquí, ella está realmente buena y me pone nervioso. Ni siquiera sé por qué una maldita chica causa eso en mi. Nunca me ha pasado, y lo voy a averiguar.