¿Kosei?

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Volviste a despertar, esta vez estabas en una especie de bar, la luz era tenue, ya no estabas atada, pero tú cuerpo estaba muy cansado como para siquiera pensar en huir, además de que te encontrabas rodeada de personas particularmente extrañas, tu vista fue a dar sobre el hombre de las manos automáticamente, él se acercó a ti, y cuando estuvieron uno frente al otro comenzó a hablar, -A sido una verdadera molestia traerte asta acá, pero confío en que a válido la pena, ¿o no Kurogiri?- escuchaste hablar a una especie de sombra oscura y asumiste que él era Kurogiri, te atreviste a preguntar nuevamente.
T/N: ¿Quienes son?
Esta vez te respondió, casi formalmente, -Dabi, Himiko Toga, Twice, Compress, Tomura Shigaraki y por supuesto un servidor, Kurogiri- dijo por fin el hombre sombra, mientras dirigidas tu vista hacia cada uno de los nombrados, quisiste medir tu suerte por lo que hiciste otra pregunta.
T/N: ¿Por qué estoy aquí?
Tus palabras volvieron a perderse en el silencio por un momento, luego Shigaraki tomo la palabra.
Shigaraki: Tienes un kosei muy fuerte, seré breve, no me gustan los discursos, únete a nosotros y acabemos con los héroes.
Se sacó la mano de la cara y pudiste ver esa tétrica sonrisa, no sabías de que hablaba y aún que así fuera no querías hacerle daño a nadie.
T/N: Yo...n-ni siquiera tengo un don...y aún que lo tuviera no accedería, yo no quiero dañar a nadie, no quiero problemas!
Tenías miedo, Toga, la chica rubia, no tardo ni un minutos en lanzarse al ataque para enterrarte sus cuchillos, Kurogiri rápidamente abrió una especie de portal en tu pecho haciendo que el cuchillo atravesara por el evitando herirte, tú por instinto te cubriste con los brazos, todos estaban a la defensiva en cuanto te vieron mover los brazos, intentaste levantarte para salir corriendo pero no te diste cuenta que Kurogiri abrió un pequeño portal cerca de tu cuello y lo último que sentiste fue un pinchazo como el de la primera vez, volviste a perder el conocimiento. En otro lado de la ciudad, un grupo de héroes discutían sobre una misión, entre ellos unos cuantos estudiantes de la academia más prestigiada de Japón, la U.A. nos centraremos en el rubio de cabellos rebeldes quien menos ponía atención, la junta concluyó en verse la próxima semana para discutir los toques finales y atrapar a la liga de villanos, el rubio se levantó de su silla y se estiró para luego salir de la sala junto a sus compañeros y maestro, un auto los llevo asta la academia, cada uno fue a su habitación, pero el rubio no durmió mucho, tenía una extraña sensación en el pecho, se la paso haciendo abdominales ignorando aquel pesar, por fin a eso de las 2 a.m. se sumió en un sueño profundo, los días pasaron, casi no comías, no sabías quien eras, como habías llegado asta donde estabas, por las noches tenías pesadillas, siempre la misma situación, una calle oscura en la que tus gritos y movimientos bruscos se perdían, luego despertabas sudando frío y sin poder entender nada, tus días transcurrían en un cuarto oscuro con paredes de metal y nada más que un colchón en el que "dormías", habías perdido por completo la noción del tiempo, estabas aislada, y para colmo nadie te había dicho que era eso del kosei.

Tu Protector (Katsuki Bakugou x T/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora