Un pequeño alemán corría por un gran campo de flores. Sonreía y reía. Intentaba no ser atrapado por su padre. Este lindo niño estaba tan feliz.
-Oh kleiner, wo bist du?- Decía su padre mientras buscaba a su querido hijo entre las hermosas flores.
El pequeño reía entre girasoles, hortensias, rosas, tulipanes, dalias y lirios. Esperaba ser encontrado y abrazado por su mayor.
-Ich habe dich gefunden, meine Liebe- Escucho el pequeño, para luego sentir como era cargado.
-Ich liebe dich, Papa- Le dijo para darle un suave beso en la mejilla.
El mayor caminaba hacia una hermosa casa con el chiquitín en brazos, dándole besos por toda la cara y haciéndole cosquillas, escuchando la hermosa risa de su primogénito.
-Großvater!- Grito el niño al ver a su amado abuelo sentado en una pequeña mesa de té junto a la casa.
El hombre tenia una sonrisa al ver a su nieto acercarse. El chico le dio al niño, este lo cargo y le dio un beso en la mejilla, para luego darle una galleta de mantequilla y apreciar como el pequeño se la comía. Luego le sentó en una silla a su lado. Luego el padre del niño se sentó al lado de este.
-Ich liebe euch beide sehr... Ich möchte, dass du immer bei mir bist- Dijo el mas pequeño, dando un tierna sonrisa.
Los otros dos solo le dieron una sonrisa algo triste y lo abrazaron. acariciando la espalda y cabeza del menor.
_________________
____________
________
_____
Alemania despertó. Se intentaba levantar del piso, pero su espalda le daba tanto dolor que evitaba que la acción fuera hecha.
-Ich wünschte, Sie wären hier bei mir... Ich vermisse sie so sehr- Susurro el alemán, limpiando algunas lagrimas que salieron de sus hermosos ojos.
Y después de esas palabras y limpiar sus lagrimas, se acomodo e intento volver a dormir.