The Black Ghots (Jensoo)

Capítulo 17

Pov. Jisoo

Me encontraba observando a la castaña, se notaba nerviosa. No es para menos mi mirada puede llegar a ser muy intimidante. Sin embargo, Jennie nunca hace nada estúpido sin una razón aparente. Obtener esos archivos podrían ayudarnos mucho contra mi padre, tengo curiosidad de saber que contienen, Jungkook podría descifrarlos, eso lo decidirá mi madre mañana.

Jennie no estoy enojada, solo que... hoy ha sido un día lleno de revelaciones por parte de mi madre y no ayudo saber que volaste un edificio-- digo y me dirijo al sofá, la castaña me sigue y se sienta a mi lado.

Lo siento princesa, no teníamos tiempo necesitábamos una solución y fue lo primero que se nos ocurrió-- me responde abrazándome, atrayéndome a su pecho, correspondo su gesto.

Eso es una excusa, tu siempre quieres explotar todo-- le digo ella ríe de mi comentario y comienza a jugar con mi cabello. Nos quedamos así, hasta que, el sueño me ataca y comienzo a dormir me.

Vamos te llevare a la cama-- dice Jennie, me levanta del sofá y me alza, rodeo su cuello con mis brazos y camina hasta la habitación. La castaña quita mis zapatos, luego los de ella y los deja a un lado. Se acuesta a mi lado, coloca su brazo debajo de mi cabeza y yo rodeo su cintura, continúo jugando con mi cabello, hasta que, Morfeo llega a mí.

Despierto al día siguiente, Jennie duerme a mi lado como una piedra. Me pregunto cuántas locuras pueden salir de su cabeza, admito que ha hecho un sin fin de cosas estúpidas y más de una vez nos ha puesto en peligro, pero, de su cabeza han salido los mejores y más lindos momentos de mi vida.

Cuando ocurrió la falsa muerte de mi madre quede destrozada, ella era todo para mí y para Jin, por un tiempo estuve bien, Seokjin y mi padre me apoyaban. Luego mi padre comenzó a cambia, era más violeto, frio e incluso en algún momento golpeo a Jin. Todo empeoro cuando Jin empezó a salir con Nam estaba ausente, por largos periodos de tiempo.

El distanciamiento de Seokjin fue lo que me hizo llegar a mi limite, entre en depresión. No me importaba la escuela, no me importaba mi padre, ni siquiera mi vida importaba. En esos momentos, tan triste y sola un rayo de luz apareció y me rescato, no solo eso, me conquisto y nunca me juzgo por mis heridas.

Jennie desde que apareció ha sido mi claridad, lo cual, es irónico si tenemos en cuenta su adicción por los colores oscuros y opacos, especialmente con el negro. Me rio un poco de mis pensamiento, la castaña empieza a despertar.

Que mejor forma de despertar, que con, el sonido de la risa que más amo en este mundo-- dice Jennie yo sonrió.

Sí que eres cursi Jendeukie, pero, así te amo-- digo ella sonríe gran parte de su cabello cae sobre sus ojos, lo aparto con mi mano para ver su mirada. Con las demás personas su mirada refleja seriedad y frialdad, conmigo es diferente, me muestra ternura y amor, eso me derrite por completo.

¿A qué hora es el desayuno?-- pregunta cerrando sus ojos.

A las diez, si no, mal recuerdo-- respondo acurrucando me mas a su costado. La castaña agarra su teléfono de la mesita de noche para ver la hora y abre sus ojos como platos.

Amor son las 9:45... Tu madre llegara en 15 minutos-- dice me suelto rápidamente y salgo de la cama para cambiarme. Jennie me imita, toma sus cosas y se dirige al baño a toda velocidad. Busco algo, con lo que, cambiarme en el armario, a Jennie no le molesta que use su ropa. Agarro una camiseta blanca sin detalles, un pantalón jean ajustado y mis zapatos blancos del día anterior.

Jendeukie entra a la habitación, arrojando la ropa sucia a algún lugar no visible a simple vista, ya no está cubierta de hollín y suciedad, pero, su cabello está seco supongo se limpiaría anoche, luego de que, me quedara dormida. La castaña se sienta en su cama y procede a ponerse sus botas estilo militar, se cambió a una camiseta negra sin ningún detalle y un jean azul oscuro rasgado en las rodillas.