7 Grandes Héroes

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Hiro

Los cálidos rayos de sol rodean a la habitación, es una fresca mañana de primavera donde los árboles de cerezo florecen y los pájaros cantan, perfecto para salir y tener un día de campo en el parque central de San Fransokio. Respiro un poco e intento atar la corbata mientras me veo en el espejo, es la primera vez que noto lo mucho que he cambiado y lo que he llegado a hacer gracias a Tadashi. Toco suavemente cada parte de mi rostro y recuerdo al chico de 14 años que batallaba en peleas de robots, se metía en líos y era constantemente rescatado por su hermano mayor. ¿Qué hubiera sido de mi si aquel accidente en la universidad nunca hubiera pasado? Mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas, no puedo seguir fingiendo que no ha pasado nada, estoy cansado de esto. Honey entra a mi cuarto y por un instante nuestras miradas chocan con las del espejo. Parpadeo rápidamente intentando ocultar todo el dolor que siento en estos momentos y sonrío débilmente. -Hola Honey- digo.

- ¿Listo para el gran día?-

- De no ser por la corbata estaría más que listo-

Honey se acerca y sin preguntar comienza a acomodarme la prenda, si fuera un día cualquiera ella hubiera sacado cualquier tema del cuál platicar pero hoy es distinto, está tan adentrada en sus pensamientos que no nota que la corbata está asfixiandome. -Ho... Ney...- intento hablar pero el aire en mis pulmones es escaso.

-¡Hiro! Lo siento- dice preocupada.

Mientras recupero el aire ella intenta disculparse, no estoy enojado, no, comprendo a Honey, al igual que yo ella perdió a su compañero y sobretodo a lo que parecía ser el amor de su vida. En teoría, este día debería ser uno de esos en donde te alegras y enorgulleces, para nosotros hoy es un momento para recordar aquella horrible tragedia.

Hace algún tiempo, después de haber derrotado a Callaghan, Krei, junto con Fred, nos motivó a formar un grupo de superhéroes encargado de proteger a San Fransokio y, a pesar de mis constantes rechazos, al final no pude evitar no unirme. En una ocasión, mientras planeabamos una mejor técnica de ataque, Krei llegó a visitarnos y sin querer tiró una antigua caja donde no sólo se encontraban los primeros robots que construí, sino también una foto de Tadashi y mía paseando en bicicleta, desde ese momento Krei no dejó de pensar en el accidente y llegó a comentarme en secreto la idea de poner un monumento en su honor. Al final no pasó mucho para que los demás llegaran a enterarse y se pusieran manos a la obra. Así que aquí estamos, en el día de la inauguración, listos para conmemorar a mi hermano pero, no estoy nervioso por eso sino por la idea de que dentro de unas horas diré unas palabras y aún no me siento listo.

Krei me despierta de mis pensamientos. -Hola chico listo- sonríe intentando darme ánimos. Al quedarme sin mis padres y hermano, Krei se convirtió en mi modelo a seguir incluso había días en los que él personalmente me dejaba en la universidad. -Hola Krei- digo en respuesta a su saludo. El jóven empresario me da una leve palmada en el hombro y deja la habitación. Escucho a mi tía decir que todo está listo para irnos y a Baymax preguntándole a Fred como se siente después de una caída en las escaleras, suelto una leve risa al recordar que no estoy totalmente solo, tengo a mis amigos y a mi familia (aunque sea muy pequeña).

-Adiós Tadashi- digo mientras dejo su gorra en la cama que antes le pertenecía y bajo, listo para honrar a mi hermano.