Natsu:El hijo del apocalipsis

Capitulo 0: Acnologia

[Hace 400 años] [Montes Secreta]

En una pequeña villa, oculta entre grandes montes, vivían dragones y humanos en una coexistencia maravillosa, niños jugando por las calles, subiéndose y jugando con las enormes bestias que los miraban alegremente, personas haciendo su día a día, comprando comida en el mercado o saliendo simplemente para pasar el rato.

Si vemos mas de cerca aquella villa, vemos varias casas, de las cuales podemos destacar una, una casa de tamaño pequeño, que tenia una cruz verde en la puerta, indicando que ahí, habitaba un doctor.

[Casa del doctor]

Dentro de este hogar, hay una habitación, donde hay una camilla hecha de heno, cubierta con una piel animal como manta, había un balde lleno de agua tibia y un trapo, en una especie de mesa hecha con madera, habían instrumentos médicos que parecían estar hechos de algún tipo de metal y mango de cuero.

Al frente de la cama podemos ver a una persona sentada, de la cual se podía apreciar una luz verde muy clara, en sus manos sostenía una paloma que tenia una pata lastimada, al pasar los segundos, la herida del animal se había completamente sanado.

-Listo pequeña, con eso ya podrás caminar con normalidad-

El se acerco, hacia una ventana de la habitación, en donde extendió sus palmas y dejo que se fuera el pequeño animal.

Con la luz del sol podemos apreciar su figura mas detalladamente, el tiene una tez morena, cabello azul, de un largo moderado, con ojos del mismo color, vestía una bata de color blanco, con una polera color verde debajo y unos pantalones azules. El miro hacia afuera el cielo y esbozo una sonrisa.

Detrás suya se escucharon unos pasos apresurados y se abrió la puerta de golpe, el se dio la vuelta, y miro a una pequeña niña de tez morena igual que el, ojos azules y pelo color marrón, vestía un vestido de color verde, con un sombrero y tenia un pequeño collar que tenia 6 magatamas de color blanco.

-Papá, Papá, volvimos de ir al mercado- Menciono ella sonriendo felizmente

-Amelie, ¿Qué te dije sobre entrar en la habitación de trabajo de tu padre?- Detrás de la pequeña, apareció una mujer, de tez morena, ojos marrones y pelo marrón, vistiendo un vestido casual de color blanco y un sombrero al igual que su hija para taparse del caluroso sol.

-No importa cariño, no ha venido nadie en toda la mañana- Dijo mientras el se paraba de su asiento para abrazar a su esposa, para posteriormente levantar a la pequeña en sus brazos y darle un beso en su frente.

-¿Que tal les fue, Kamika?- 

-Nos fue bien, conseguimos todo lo que queríamos- Dijo la mujer ahora identificada como Kamika, la cual salió de la habitación para dirigirse a la sala de estar, que fue donde dejaron todas las compras.

El doctor bajo a su hija, para posteriormente ir con ella hacia donde fue su esposa, la sala de estar, era de un tamaño medio, con una mesa para tres personas, en la cual estaban 4 bolsas con los insumos que fueron comprados en el mercado, una estufa de piedra empotrada en la pared, la cual tenia un soporte hecho de madera y hierro sobre la cual se sostenía una olla, en la cual se estaba calentando agua para poder empezar a cocinar.

Kamika, empezó a sacar ingredientes de las bolsas, mientras tarareaba felizmente una melodía y los empezaba a guardar en una pequeña alacena que había al lado de la mesa.

-Los días han estado mas calmados, parece que la guerra de los dragones por fin esta por terminar- Menciono el peli azul, mientras ayudaba a guardar las cosas.

-Ojala sea así, ya han habido muchas bajas por parte de ambos bandos- Ella le respondió mientras terminaban de guardar los alimentos, -Amelie, muéstrale el regalo que le compramos a tu padre-