"Decisiones"

"Decisiones" Capitulo 7

Capítulo 7

Y de pronto sonó su celular, lo mire algo fastidiada y contesto:

-¿Hola?
-Si, pero ahorita estoy ocupado
-Esta bien

Yo solo atine a retroceder lentamente, me quede mirando el piano que tenía en la sala, era un piano hermoso, y hizo recordar muchas cosas de mi padre... Y salí sin hacer ningún ruido mientras sentía un enorme vació en mi pecho, abrí y cerre la puerta sigilosamente, supongo que Esteban pensaría que me iría a quedar, por que se fue a seguir la llamada a la cocina, corrí hasta desaparecer de la vista de Esteban, o de su casa, llegue a una esquina exhausta y me senté en una banca, Pero ¿Qué estaba pasando?, ¿Por que me sentía así?, ¿Qué era este sentimiento?, solo agarre mi pecho y me golpee no quería sentir nada, no quería nada de nada, me pare y gruñí como una niña de pronto ya no sabía que hacer, llego un momento desesperado, que solo quería correr e irme lejos, correr y poder volver a mi papá, pero yo sabía que eso era imposible, puesto que el estaba muerto, me sentía tan impotente de no poder verlo de nuevo, era mi gran sueño y mi gran anhelo, el siempre fue el unico hombre que me dio amor y afecto, era el padre más maravilloso, y se tubo que ir, lejos de mí, dejándome sola y triste, sin mas consejos, sin mas risas, sin mas caricias, cuentos, todo eso se fue, todo eso lo recordé en unos instantes, pero de pronto ya todo se había acabado, me pare lentamente, muy decidida a irme de ahí y dejar todo como estaba, no quería sentir nada, puesto que sabía que un solo sentimiento me destruiría y todo eso de nuevo me hundiría,y me fui a mi casa, estaba furiosa conmigo misma no sabía con que desquitarme, lo que si sabia era que al llegar a casa empezaría un nuevo infierno para mi, "Mi madre", abrí la puerta y comenzó.

-Sarah, ¿Dónde estabas?
+Déjame en paz Rebeca, no estoy de humor
-Pero hija...
+Ya!, Basta!, Déjame sola!
-No, nunca mas hija, ya no quiero dejarte sola, nunca mas, por favor permite me estar a tu lado, permite me escucharte y aconsejarte, por favor hija...
+Sabes algo, por muchos años yo deseaba escuchar esas palabras de tu boca, pero ya no, ya no es mi sueño, me canse de esperar esas palabras de ti, me arte de rogarte, ya no te molestes en insistir, ya no te molestes en nada, solo déjame, y aléjate, me hiciste más daño con tu indiferencia, ¿Qué pensabas?, que tu eras la única que sufría o ¿Qué?
-Es que hija, tu no sabes nada...
+Claro que no se nada, por que todo me lo contó un amigo de mi papá, tu nunca te acercaste a decirme que papá estaba enfermo de cáncer, no me dejaste despedirme de el, no me dejaste ni siquiera ir a su funeral.
-¿Qué?, eso te dijo el amigo de tu papá
+Sí, y ya déjame, sufrí con su muerte y a ti no te importo nada dejarme sola, nunca recibí unas palabras de apoyo o un simple consejo, ahora, ahora solo quiero que te vayas y me dejes sola.
-Pero...
+Adiós...

Se quedo sin ninguna palabra, solo se me quedo mirando y algo sorprendida, supongo por que nunca le había dicho todas sus verdades, la esquive y subí las escaleras, me fui de frente a mi cuarto, renegando, todo lo que me tubo que pasar hoy, me encerré, de pronto me miré al espeso, Me quede con la ropa de la hermana de Esteban, me reí un poco, fue muy estúpido irme a meter a la casa de alguien que no conocía, era sumamente estúpido, me saque toda esa ropa, la separe para lavarla y un día mandárselo por correo tal vez, lo que si era cierto, es que nunca más iría por ese barranco, aunque la puesta de sol fue hermosa, mi seguridad estaba primera, ¿Aunque se porto muy amable?, no no, era necesario, nunca más vuelvo por ahí, me hecho en la cama y en a penas unos segundos, me quede exhausta y dormí.

Soñé con el, pero ahora el sueño era mas claro, juntos agarrador de la mano, sonriéndome y abrasándome, en el barranco donde nos vimos, y mirando el atardecer, fue algo lindo pero, se sentía a la vez una tristeza, algo raro e incomodo.
Me levante y me cambie para ir al colegio, me peine y salí, baje a tomar desayuno, había ensalada de frutas y un vaso de chocolate, estaba comiendo, y vi a mi mamá recién salir de su cuarto, tenía grandes ojeras y algo desarreglada, espera... ¿Eso era un moretón?, ¿Pero que mierda?, ¿Qué había pasado?, ¿Anoche no estaba así?

-¿Qué te paso en la cara Rebeca?
+Me caí anoche
-!Dime la verdad¡
+No dices que no te importa, !Entonces para que preguntas¡
-Es una estupidez que estés con ese hombre, Ya te lo advertí, ahora has de tu vida una mierda
+Ya Sarah, soy tu madre háblame con respeto
-¿Respeto?, tu me pides respeto, cuando no tienes respeto por tu misma

Agarre mis cosas y salí de la casa, ella se quedo parada en media escalera, deje a medio comer mi ensalada y me fui, había salido muy temprano y aproveche el tiempo para ir a comer cerca, nunca había tenido tanta hambre, fui a un pequeño lugar donde vendían desayunos y le pedí un jugo de fresa y una empanada, estaba rico, aún estando cerca de la casa, nunca había venido a comer aquí, creo que lo empezaré a hacer más seguido, asi salgo de mi casa más temprano, y no tengo que soportar a mi mamá, termine y ya hacía 10 minutos antes que cierren la puerta, fui corriendo pues estaba cerca, me había olvidado por completo que estoy con André en el mismo salón y que me había dado un beso, mi madre tenía un moretón, encontré al chico con quien soñaba, todo en tan poco tiempo, me sentía asustada, y algo confundida, no sabía que iba a hacer, los problemas se me habían juntado en tan poco tiempo, ah y los cortes... en fin.

Estaba subiendo y en las escaleras me encontré con André.

-Hola Sarah...
+Hola André-De un día para otro había perdido total interés por el, no sabía que me había pasado.
-¿Cómo estas?
+Bien, gracias
-¿Te acompaño al salon?
+No esta tan lejos, no creo que me pierda *Sonaron risas
-Sarah, lo que paso ayer...
+Lo que paso ayer, no paso, ¿Esta bien?
-No!, por que si paso!
+Déjame en paz
*¿Qué paso ayer?-Dijo un chica acercándose a nosotros, al parecer escucho nuestra conversación.
+¿Tu quién eres?-Pregunté
-Soy Antonella, la enamorada de André-Respondió...