"Decisiones"

"Decisiones" Capitulo 12

Capítulo 12

No paraba de abrazarla, solo quería estar junto a ella sin soltarla, con tanto amor, junto a ella como lo que eramos madre e hija, Esteban se quedo en la puerta, mirándonos la verdad me importaba poco, pero ese momento me llene de tanto amor, mi mamá aún tenía unas cicatrices de los golpes que le daba ese señor, no sabía si era el momento indicado para decirle que lo dejase, para decirle que seamos felices, para empezar de cero, para construir de nuevo nuestro hogar...

-Mamá, déjalo si...
+Hija, no puedo, es el mi jefe...
-Mamá puedes conseguir otro trabajo, pero déjalo, por favor...
+Hablaremos de eso más tarde si, y ahora dime quién es este muchacho...
-Ah, el es Esteban, es mi... novio- dije tartamudeando
+Mucho gusto Esteban- dijo dándole la mano
*Mucho gusto señora, es un placer conocerla- dijo respondiendo el saludo
+¿Quieres pasar?, o te vas a quedar parado toda la tarde en esa puerta.
*Ah, no no, gracias- dijo pasando y cerrando la puerta a su vez.
-Siéntate- dije
*Gracias...
-Má, también siéntate, traeré algo para tomar
+Está bien hija, gracias...

Mientras me iba a la cocina, escuche que conversaban, había decidido hacer un poco de jugo de fresa, así ellos podían conversar un poco, y yo bueno, entreteniéndome haciendo jugo.

*Y como se encuentra señora- dijo Esteban
+Pues muy bien, ahora me encuentro bien, gracias a Sarah.
*Y... conforme a lo demás...
+¿A lo demás?
*Si, señora discúlpeme, pero quiero ayudarlas a usted y a Sarah- dijo firmemente
+Muchacho, esta bien que quieras ayudar a Sarah, pero yo, soy una persona mayor se lo que hago.
*Disculpe señora, si usted sabría que hace, ya habría dejado a ese hombre.

Mi mamá se quedo callada, y no supo que más responder, yo escuche todo desde la cocina, tratando de no hacer tanta bulla.

*Señora, si no lo hace por usted, al menos hágalo por Sarah...
+Lo haré, renunciare...
*Gracias señora, eso le hará muy feliz a Sarah...
+Pero no le digas nada...
*¿Cómo?
+Si, quiero darle la sorpresa, quiero decirlo cuando ya haya pasado.
*Está bien señora, no se preocupe.

Me iban a ocultar algo, que difícil, tendría que hacer como si no hubiese escuchado nada, y bueno Esteban solo lo hacia por que mi mamá se lo habría pedido.

-Aquí esta
+¿Que es Sarah? Por que demoraste tanto- dijo mi mamá tratando de ver que llevaba
-Es jugo de fresa ¿Rico no?
*Se ve rico Sarah- dijo Esteban sacando la lengua, en son de burla.
-No es chiste- dije riéndome
+Gracias hija- dijo
*Esta rico Sarah, enserio- dijo saboreando
-Hey gracias, como si fuera difícil hacer un jugo- dije riéndome

Todo parecía perfecto, solo faltaba que mi mamá terminase con ese patán, en fin, conversamos con tanta confianza, sonreíamos como si jamás lo hubiéramos hecho, era una felicidad diferente, una felicidad de que encontramos la paz en nuestro hogar, Esteban era todo lo que esperaba y gracias a Dios pude encontrarlo.

Hablamos un largo rato, nos reímos mucho, nos llevábamos super, había decidido enseñarle algunas fotos, y nos reímos de mi cuando era más pequeña, las risas eran ya inevitable, pero de pronto sentí algo en mi pecho, sentí angustia, no quería que mi mamá me viese así, así que mejor me iba de ahí, el dolor era inevitable, la sonrisa había desaparecido y me sentí caer,,,

-Mamá ahora vuelvo si, iré con Esteban afuera
+No te preocupes hija, iré un rato a descansar, me siento un poco cansada
-Esta bien ma, anda, yo te paso la voz cuando llego si.
+Esta bien hija no llegues muy tarde por favor
*No se preocupe señora la traeré temprano...
+Confía en ti muchacho
-Vale mamá, cuídate

Sentía que mi corazón se reprimía, un sentimiento extraño y un dolor muy grande...

*Sarah que pasa...
-Lo siento Esteban, algo siento, por eso salí de la casa no quería que mi mamá me viese así
*¿Así como Sarah? ¿Que te pasa?
-No se, siento un apretón en el pecho y me siento triste, no se Esteban
*Pero si hace un momento estábamos bien
-Lo se, lo se...

De pronto nos sentamos en una banca, pasaban un montón de carros, de pronto subí la mirada, y fije mirada a un carro que estaba pasando, me quede con la boca abierta, no podía creerlo, me pare rápidamente y empecé a correr detrás del carro.

*Sarah! Sarah! ¿A donde vas?

Salí corriendo detrás del carro, no me importo nada, no paraba, pero mi cansancio era lo menos que me importaba, mis ojos se empezaron a llenar de lagrimas, aún si no estaba segura de a quien había visto, tenía enormes ganas de cortarme, empece a arañar mi brazo con mis uñas, hasta que sangraban, el carro paró en un semáforo mientras estaba en rojo, me empece a acercar, para poder ver quien era el que manejaba, pero volvió a arrancar, más aya se estaciono, y me quede parada, viendo quien bajaba, de un lado bajaba una señora, de la parte de atras dos niños y el que maneja, no podía creerlo...

-Papá- susurré