❝𝑵𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒓𝒂́𝒔 𝒔𝒐𝒍𝒂, 𝒔𝒆𝒓𝒆́ 𝒖𝒏𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒓𝒆𝒍𝒍𝒂 𝒈𝒖𝒊𝒂𝒏𝒅𝒐𝒕𝒆 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒄𝒊𝒆𝒍𝒐.❞
"¿Enfermedad... Avanzada?. - Susurró la pequeña de 11 años junto a su padre sentada en la habitación de hospital.
No logramos diagnos...
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Las horas pasaron rápidamente en ese gimnasio, y cuando terminé mi tarea solo pude quedarme observándoles desde una esquina a mis compañeros.
Hinata era tan motivado que me sorprendía, había olvidado esa parte de él completamente.
Pero su motivación era tan nueva que... Me cansaba un poco.
¿Como fue que quedé en esta banca después de todo lo que hice? ¿Por qué no logro tener la misma motivación que Hinata, cuando siempre la tuve?
Hasta él estaba sorprendido de que solo le observara.
Sonará algo egoísta, pero desde el primer día que el coraje ha sido mi mayor compañía en mi batalla contra mi misma.
Ese dicho de "tú eres tu mayor enemigo" aplica completamente a mi.
Siempre la primera en criticarme soy yo, o en pensar que hago algo mal.
Pero no es por reprimirme, ni por sentirme intimidada, es solo por el hecho de que me encerré en mi burbuja y ya no sé cómo salir.
El primer año de secundaria, los últimos meses, lo cursé aquí en Miyagi pero no en la secundaria de Hinata, fue en otra.
Mi papá me vio tan amargada por no poder jugar voleibol, que me metió a una secundaria la cual enseñaban respectivamente eso, y muy bien.
La escuela secundaria Kitagawa Daichii.
Por eso solo recuerdo a Kageyama como un buen jugador, él es realmente genial.
Es... Envidiable.
Su fuerza, su poder, su concentración, todo en él lo hacía completamente envidiable en mi punto de vista, y a la vez...
Lo veía completamente reprimido.
Conocí un par de gente en esa secundaria, pero como fue mi primer año y cuando empeoré me cambiaron a una en Tokio.
No duré más de un mes en esa secundaria en Tokio, pero fue mi segundo año, y conocí a un par de amigos en esa los cuales aún les tengo contacto.
Después tuve clases en el hospital el resto de mi segundo año de secundaria, y el tercero, lo pasé los primeros meses en una nueva secundaria de Tokio.
En ese momento ya me daba igual, la mayoría de mis amigos ya estaban cursando preparatoria y no conocía a mucha gente.
No duré nada de tiempo en ella, más por el hecho de volverme completamente antisocial y no podía entablar una conversación ni con mis profesores.
Estudie el resto de mi ultimo año de secundaria en el hospital para compensar, y volverme más confiada.
Aunque eso no quitaba que habían veces las cuales me "escapaba" del hospital de Tokio, si escapar se dice a salir sola a comprar ramen a dos cuadras del hospital.
