00-INTRODUCCIÓN

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00 | INTRODUCCIÓN

MARIANNÉ ESTABA ACOSTUMBRADA A ESO, pero mientras estaba allí, siendo solo una oyente de aquellas estupideces, no podía tolerarlo

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MARIANNÉ ESTABA ACOSTUMBRADA A ESO, pero mientras estaba allí, siendo solo una oyente de aquellas estupideces, no podía tolerarlo. —¿No quieres decirme quién es tu novia ahora?— preguntó por décima vez la reportera pese, a la incomodidad del cantante. One Direction no había dejado de dar entrevistas en todo el día, y curiosamente a Harry Styles solo le cuestionaban con quién compartía su cama en las noches o intercambiaba saliva en el día. —¡Oh, en serio eres todo un chico malo! Seguro que rompes muchos corazones por día—se burló la mujer. Marianné alejó con gentileza a la joven que estaba haciendo su maquillaje y se acercó detrás de cámara. Promocionar la segunda entrega de Star Wars: The Last Jedi no era trabajo sencillo. Ella estaba acostumbrada a la clase de preguntas sexistas y estúpidas que le hacían todo el tiempo, pero cuando veía a alguien más sufriendo por eso, no lo toleraba.-Pero en serio, ¿con quién...

—-¡Ay, por dios!— la voz de la actriz y cantante interrumpió a la reportera, de repente, tuvo muchos ojos mirándole. El lugar quedó en silencio, pero la mirada de la mujer no se despegó de la reportera de cabello oscuro —¿Es en serio? Estos chicos llevan sentados allí más de cinco horas y solo he escuchado que le preguntan a él...— dijo señalando a Harry — con quién demonios está saliendo, ¿No tienen preguntas más interesantes? ¡Créame, los cantantes no solo pensamos en sexo o rupturas amorosas! — bramó con enojo.

—Disculpe, Delacour, pero está siendo muy grosera...

Marianné miró a la reportera con una ceja elevada —¿Te he faltado el respeto?— cuestionó, sabía que interrumpir la entrevista no era muy ético pero seguirla escuchando tampoco. No se trataba solo de las preguntas, si no, de la intención. La mujer estaba intentando conseguir una exclusiva, sin importarle lo invasiva que pudiese ser. —Creo que tú y los veinticinco reporteros que pasaron antes le están faltando el respeto a ellos cuatro, y en especial, a él. Los tienen allí sentados para preguntar las mismas cuatro estupideces, y tres de ellas tienen que ver con qué hacen en su vida privada, ¿no pueden preguntar sobre la música, los videoclips, la escenografía? ¿Algo relevante?

—Así que tú vas a decirme cómo hacer mi trabajo — señaló la mujer, Marianné se encogió de hombros.

—Llevó diez años en el medio, creo que se algo...— fue lo que dijo. La reportera continuo quejándose sobre su mala educación, pero la joven actriz poca atención le prestó, se giró hacia el grupo —Lamento el mal momento, chicos, solo...no permitan estas cosas —pidio, los jóvenes sonrieron, no parecían molestos en lo absoluto.

Claramente, Marianné no salió ilesa de ese desplante. Apenas puso un pie fuera de la sala, Clarisse, asistente de su mánager le fulminó con la mirada. Parecía como una olla a presión a punto de explotar, sus facciones estaban duras y su cara roja. —¿Estás demente? ¡Esto te va a afectar!

Marianné continuó caminando mientras asentía —Seguro que sí, pero no voy a dar ninguna entrevista aquí hoy.



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