Capítulo Final (1/2)

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*Días después*

Dinah: Lamento todo lo que ha ocurrido, tu mamá era una buena mujer, Mila.

Dinah: Necesito saber de ti. Ya ha pasado mucho y estoy preocupada. Por favor no te rindas.

Dinah: Sé que estas pasando por mucho, yo solo quiero estar para ti, para apoyarte, eso hacen las amigas... ¡O al menos eso me dijiste!

Dinah: Ya no se ni cuantos mensajes y llamadas te he hecho. Por favor dame una señal de vida, me hace sufrir de ansiedad al no saber de ti.

Dinah: Seguiré insistiendo, no me rindo fácil... ¡Te extraño como no tienes idea!

Dinah: Quisiera estar ahí contigo y abrazarte hasta que dejemos de llorar y nuestros ojos parezcan unos tomates... Te sigo extrañando.

Dinah: Te quiero mucho Chancho... Por favor regresa pronto.

Esos y más mensajes que Dinah Jane enviaba al celular de su amiga todos los días, pero esta nunca le contesto, desde el día del funeral, Camila había cortado toda comunicación con todos, había guardado su celular y no había querido verlo, había ignorado que este existía y de esa manera los demás no existían para ella.

Ella no necesitaba consolación de nadie, ni la lastima de otros, ni mucho menos que le dijeran todo iba a estar bien cuando no era así. Ella solo quería llorar, dejar de respirar y... Quería de vuelta a su madre.

Así como ignoraba a Dinah, también lo hacía con sus otros amigos, y en especial con Lauren Jauregui.

No, no deseaba verla, no quería saber de ella.

Las razones, ni ella misma las tenía claras, pero desde el funeral, desde esa pelea sin sentido con ella, sentía que no valía la pena.

Ya nada valía la pena para ella...

*Flashback*

El día era desconsolado y triste, tanto como para familiares y amigos o personas cercanas a la familia.

Y el cielo estaba triste, era como si Miami sintiera la pérdida, pues la nubosidad grisácea no hacía falta, todo estaba de luto ese lamentable día de despedida.

La familia Jauregui hacia compañía a Lauren y daba el sentido pésame a la familia Cabello, la ojiverde a simple vista se miraba afectada, y es que la señora Cabello había sido una buena amiga y consejera con ella, la había ayudado tanto con su hija como a su persona. El cariño simplemente existía.

Alejandro Cabello vestido con su traje negro llevaba una mirada de perdida y dolor, había soñado con su boda un día antes, vaya golpe de realidad ahora mismo mirando como bajaban el ataúd de su difunta esposa, pero no quería llorar, quería ser fuere por sus hijas, por el recuerdo de su amada.

Pero las que no contenían todos sus sentimientos eran sus hijas, sobretodo Camila, ella era otra historia a parte. Todos al verla se preocupaban y es que la chica se miraba terriblemente mal por fuera...

Y era eso lo que Lauren observaba con tanta tristeza, no podía dejar de mirarla, su corazón le pedía a gritos que fuera a su lado, que la consolara y la llevara lejos del agudo dolor.

Pero no podía, sobretodo después de su confesión de esa noche.

Terminado todo, y cada persona iba abandonando el cementerio, algunos se despedían de la familia, otros simplemente bajaban la mirada con respeto y se iban en silencio.

Clara: ¿Vienes con nosotros? -le pregunto a su hija.

Lauren: Iré luego Ma, quiero hablar algo con Camila antes.

No fue casualidad conocerte (Fic corta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora