Kiara

Capitulo II Un favor por otro favor

Eh de admitir cuando algo me sorprende.

Y esta vez fueron los padres los cuales no dejaban de sorprenderme.

Al día siguiente de haber tenido nuestra pequeña reunión familiar

Ya los profesores habían asimilado que me iba y me dieron algunas hojas de recomendaciones que me permitirían entrar en mi nuevo colegio.

Mi amigos ni cortos ni perezoso, al tan solo entrar en el aula ya gritaban la noticia de que me iba a mudar.

Recuerdo que me dijeron que se enteraron de la noticia porque un profesor el chismeo la noticia.

Que rápido que corren lo chismes.

Algunos de ellos dramatizaron mucho el asunto otros simplemente se desearon suerte en mi nueva escuela.

Al ver sus reacciones, me hicieron pensar que estar en medio de una noticia nueva es de un dolor de cabeza brutal.

Creo que agregare una nueva nota mental.

Estar en el ojo de la tormenta nunca va a ser bueno.

Hasta algunos querían planear una fiesta de despedida, Me negué rotundamente.

No quería que el asunto se amplíe mas, y mejor si lo corto de raíz y dejo que se queme en el fuego.

Eh de admitir que lo que más me hizo sentir incomodo fue el drama que armaron algunos, de que no me vaya que no sabrían como vivirían sin mí y unos discursos que realmente quiero olvidar.

En mi caso la verdad no sabía cómo decirles que no me importaban en lo más mínimo.

Aunque eso sonaría algo insensible de mi parte, creo que ellos también lo sienten solo que no van a decirlo.

O quizá también me estoy pensando mucho este asunto.

¿Estaré meditando muchas cosas que no deberían ser tan meditadas?

Supongo que nunca lo sabré.

"Oh, veo que aun en tu ultimo día, sigues perdido en tus pensamientos."

Y como si de una costumbre se tratase, Alvin me saca de mis pensamientos.

O ¿Debería decirle lapsus?

"Supongo que hay costumbres que nunca mueres"

La fluidez que tiene al decir eso era de sorprenderse.

Se sentía como si el ya hubiera estado acostumbrado a este tipo de asuntos.

Bueno, Hemos sido compañeros de salón desde la primaria, así que podría llamarlo como mi amigo de la infancia.

Aunque no es que hayamos sido tan unidos, o eso era a mi parecer.

Creo que eh estado callado mucho tiempo, sería malo para mi último día aquí hacerme parecer el "Lobo solitario" de turno que no quiere hablar con nadie.

"Creo que aún no asimilo la idea de que me iré mañana."

Ahora que miente con fluidez soy yo.

Lo hice sonar tan natural que hasta yo me lo hubiera creído.

"Ah, Así que era de eso, Bueno supongo que es algo natural sentirse asi, Recuerda que, si necesitas a alguien con quien hablar, Aun estoy aquí"

Y nuevamente se ofrece a apoyarme moralmente.

Supongo que es una especie de protocolo que tenemos, de a veces sentirnos en la necesidad de ofrecernos nuestro apoyo emocional hacia algunas personas que se sienten tristes.