Parte 2

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Era bien entrada la madrugada y seguían en la discoteca con la música a todo volumen resonando en sus oídos, las luces que proyectaban los faros del techo haciendo que toda aquella sala fuese como una explosión de colores, como si te encontrases e...

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Era bien entrada la madrugada y seguían en la discoteca con la música a todo volumen resonando en sus oídos, las luces que proyectaban los faros del techo haciendo que toda aquella sala fuese como una explosión de colores, como si te encontrases en medio de fuegos artificiales. La gente en la pista de baile bailaba sin ningún tipo de vergüenza, con sus sendas copas en la mano que de vez en cuando bebían sin dejar de bailar. Podían verse a gente restregarse y besarse mientras bailaban sin importar su sexo. Allí nadie miraba a nadie, no juzgaba y dejaba vivir. Solamente querían pasárselo bien, vivir la vida de jóvenes de secundaria que acababan de dejar atrás para comenzar a forjar su futuro.

Chan y Minho no se habían separado ni un momento desde que compartieron mechero hará un par de horas, solamente en los momentos en los que Chan le decía a Minho al oído que volvería con más bebida, volviendo con dos copas en la mano bien cargadas de alcohol para seguir bebiendo y bailando. Estuvieron hablando de todo aun con dificultades por la música tan alta. Minho supo que Chan era un año mayor, había estudiado la modalidad de artes al igual que él y tenía pensado seguir estudiando en la universidad de Incheon, pero este año se lo estaba tomando de descanso. Un año sabático como le había dicho el chico, algo que los padres de Minho no se lo permitirían porque le echarían de casa.

Hubo un momento de la noche en la que pusieron la canción favorita de Chan y este intentó arrastrar a Minho al centro de la pista de baile, pero se resistía y quería quedarse más cerca de la barra.

-¡Pero es mi canción favorita! Venga, ¡Vamos! ¡Quiero bailarla!

-Pues ve tú sólo. Yo me quedo por aquí- Dio un nuevo sorbo a su copa, viendo cómo el rostro de Chan comenzaba a adornarse con un puchero que lo hacía adorable.

-Quiero ir contigo. ¡Quiero que vengas conmigo! ¡Es mi canción favorita!

Chan tiraba de Minho y pudo arrastrarle un gran trecho, pero la canción había llegado a su primer estribillo y el rostro de Chan se entristeció. Tuvo que hacerse a la idea de que no llegarían a tiempo a la pista, a si que se plantó allí y sin apartarse de su vaso, comenzó a bailar.

-Ese criminal como lo mueve es un delito.- Comenzó a cantar levantando su vaso hacia el techo de la discoteca, viviendo la letra de su canción favorita.- Tengo que arrestarte, porque empiezo y no me quito. Tienes criminality, pero te doy fatality, vívete la película, flotando en mi gravity.

Minho tuvo que apartar la mirada mientras bebía un largo trago de su copa porque, el chico al que acababa de conocer hace un par de horas, estaba bailando descaradamente delante de él y aunque movía sus caderas lentamente, lo hacía de una forma muy intensa y seductora, cerrando los ojos mientras vivía y sentía con sus cinco sentidos aquella canción.

-Tiene adrenalina, en medio de la pista, vente, hazme lo que sea. I like your poom-poom, Min.

¿Quieres fuego? - Chanho/Minchan [COMPLETA] + 1 EXTRADonde viven las historias. Descúbrelo ahora