➹Durch Zufall || Vhope

Capítulo 3

Sábado por la noche y Hoseok recién se estaba retirando del cine apenas pudiendo mantener los ojos abiertos. Como era fin de semana el lugar cerraba tarde debido a la cantidad familias y grupos de amigos que llegaban por las diferentes funciones.

Estaba subiendo al transporte público cuando el teléfono en su bolsillo comenzó a vibrar, pagó rápidamente su pasaje y se dirigió a la fila de los últimos asientos para poder contestar, suspirando al ver de quien se trataba.

— Hola, mamá, me alegra oírte ¿Cómo estás? ¿Qué tal todo? ¿Cómo así llamas a esta hora? — trato de ocultar su cansancio con un tono alegre y animado para no preocupar a la mujer al otro lado de la línea.

— H-Hoseok... — logró escuchar un sollozo ahogado del otro lado de la línea que lo asustó.

— ¿Qué pasó? ¿Estás bien? ¿Te duele algo?

— N-no es eso. Yo estoy bien, hijo... el problema es tu p-padre. 

— ¿Papá? ¿Qué le pasó a papá? — pregunto preocupado ante el tono lastimero y nervioso de su progenitora.

— Él... él estaba teniendo dolores de cabeza, se desmayó y ahora estamos en el hospital.

— ¿Qué? ¡En el hospital! ¿Cómo está él? ¿Llamaste a mi hermana? ¿Es algo grave?

— Sí, no te preocupes. Ya llamé a tu hermana, ella dijo que vendrá lo más pronto posible. Tu papá se encuentra estable por el momento, pero necesita una operación pa-para tratar un tumor... t-tengo miedo, Hobi — la señora Jung suspiró, tratando de no alterarse más de lo que ya estaba.

Hoseok por su parte se encontraba atónito tratando de analizar toda la información proporcionada por la mayor.

— Okey, mamá, tranquilízate. Voy a tratar de ir o enviarles dinero — No tenía ni idea de cómo haría para cumplir sus palabras si tenía más pelusa que dinero en sus bolsillos.

— No quiero que te sobreesfuerces por nosotros. Ya veré cómo hago, quizás venda algunas cosas, empeño mis alhajas o hago un préstamo en el banco. Solo te llamé para avisar. 

El castaño bufó y revolvió sus cabellos con frustración, terminó la llamada con un corto "cuídate"  y se dirigió directo a su pequeño apartamento. 

La propuesta de Jin resonaba tentadora en su cabeza en ese momento, le había ofrecido darle el dinero que él pidiera, dinero que se ganaría por trabajar... o más bien, engañar a alguien.  Y era ahí el problema, le estarían pagando por hacer algo que aborrece, mentir. 

Ese tema tocaba, fuertemente, su moral. Es que si todo se salía de control uno de los dos podría salir lastimado, era un arma de doble filo. A él poco le importaba que sea un hombre porque él era bisexual, pero igual era denigrante porque el tipo se podía llegar a enamorar de una ilusión, o aún más peligroso, él podría llegar a enamorarse de un hetero que lo rechazaría apenas supiera la verdad.

Pero, a veces, debes sacrificarte por personas que amas ¿no?

— Seokjin, acepto el trato, nos vemos mañana en la cafetería en mi cambio de turno — habló apenas la persona de la otra línea atendió la llamada y, sin darle oportunidad a decir algo, colgó.

Apretó el puente de su nariz con poca fuerza, dejando su otro brazo colgando fuera del colchón pensando seriamente en lo que iba a hacer.

— Por favor, Jung Hoseok, esto es para ayudar a papá — se dijo a si mismo en un intento de auto convencerse que lo hacía por necesidad, pero en el fondo estaba molesto consigo mismo por no poder hacer algo más para ayudar.