Capítulo 4: El juego

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A la mañana siguiente el sol brillaba intensamente, con un toque tan caluroso que Ambar sintió las ganas de raparse todo el cabello, pero apesar de eso, ella agradecía internamente que fuera un día caluroso. Ese día tenía algo bastante especial, era el cumpleaños diescinueve de Jhonny, su primo más cercano (y único) ambos eran bastantes unidos, pero últimamente Jhonny se había deteriorado, casi al igual que el padre de Ambar.

No solía ver tanto a Jhonny como antes, aunque a Ambar le gustaba creer que tal vez, era por los estudios en la universidad, tal vez eso ocupaba mucho el tiempo de Jhonny, pero esas ideas se esfumaron, al escuchar una llamada entre Lauren - su tía - y su madre, dónde discutían sobre algo al respecto - últimamente se ha vuelto muy agresivo, ha faltado a sus clases - ha mencionado Lauren, desesperada en buscar ayuda para Jhonny.

Ella ha tratado de visitarlo, pero cada vez que Ambar llegaba a su casa él se encerraba en su habitación o simplemente la ignoraba por toda la casa. Por mucho tiempo Ambar creyó que había dicho o hecho algo para molestarlo, pero luego de analizarlo bien, llegó a la conclusión de que no tenía nada que ver con ella - hasta dónde estaba enterada - al menos, su tía Lauren seguía siendo la misma mujer encantadora de siempre, una ama de casa que es fan de la gastronomía, cada miércoles por las tardes, Lauren se acercaba a conversar con Karen, a tomar un té y de paso, llevaba capcakes reciémn horneados.

Ambar dió la vuelta en la esquina, doblando para la casa de Abigail, justo como la pelirroja había pedido, Ambar la llamó apenas entró a la casa, le contó todo sobre aquel chico que invadió su coche, como creyó que era un delincuente y al final, era la víctima, Abigail estaba tan sorprendida y asustada al respecto, pero apesar de todo le pregunto que tan lindo era aquel chico, Ambar con tal orgullo que tiene, respondió que lucía como un chico cualquiera, aunque claramente la verdad era completamente otra.

Ella pasó toda la noche pensando en aquel chico, revivió una y otra vez la escena en su mente. Decidió no comentar nada con sus padres, no quería preocuparlos o que la prohibieran de salir por el miedo que han llevado todos estos meses.

- Aún no puedo creer lo que me has contando - comentó Abigail mientras se acomodaba en el asiento del copiloto - Mi padre esta mañana lo ha comentado, hasta salió en el periodico, lo leíste?

- Varias personas se juntaron ayer para ver lo que sucedió, claramente se formó un alboroto pero no he visto el periodico, ya nadie lo lee Abi.

- Ja - Abigail hizó una mueca, ella era aficionada al periodico y seguía obsesivamente a una Thaís Martin, una reportera bastante conocida en Minset y Sanlex, muchos la describen como una persona completamente irritante y chismosa pero Abigail dice constantemente que es una mujer encantadora - Estoy segura que el sheriff Urrea lo atrapará.

- Ni si quiera ha podido atrapar al asesino de Isabella - respondió Ambar, pero al instante se ganó una mirada de sorpresa por parte de la pelirroja.

- Son casos muy diferentes Ambar, uno es un asesinato y el otro un robo - la pelirroja lucía algo molesta - Claramente un asesinato es mucho más complicado de resolver que un robo. Además el asesino no dejó nada para tratar de buscar a algún sospechoso. Fue un crimen perfecto, diría yo.

- El sheriff Urrea tampoco pudo resolver los robos del año pasado, recuerdas? Un hombre que invadía casas y por alguna extraña razón se llevaba solamente objetos preciados.

- Y si el hombre que robó ayer en el departamento de aquella familia, es el mismo del año pasado?

Ambar lo pensó, podría ser, había una gran probabilidad realmente de que fueran la misma persona. Pero, pensando mucho mejor, no era ese el asunto de ambas, las dos debían enfocarse en este año, había tantas cosas en las que Ambar adoraria participar durante este año en el colegio, estaba segura de que Abigail también.

Minset: Él Asesino Del ZodiacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora