23 6 23
                                    


Es lunes, y me toca clase de literatura.

Tuve mucha flojera de asistir, como cambiaron el profesor y llegué a la conclusión que aunque no sería tan genial como Matthew, el antiguo maestro, no me quitaba nada darle una oportunidad al nuevo.

Una chica que no recuerdo su nombre va a mi lado hablando sobre alguien sexy que anda por aquí, insiste en llevarme a conocerlo pero solo río h educada rechazo su invitación.

¿Serle infiel a mi Ben? Claro que no, soy de un hombre solamente. Además, con él tengo suficiente.

Al llegar al aula se va caminando a su clase y puedo respirar tranquila. Hoy no vi a Ben, solo recibí un mensaje de buenos días y siete minutos después el motor de su camioneta me avisó que ya iba al trabajo.

Así que será mejor encontrarmelo al volver de clases.

- ¿Cheryl? - su voz anonadada me deja más confundida que antes.

Bueno, quizá me lo encuentro antes que lo previsto.

Ahí está, con su camisa azul, pantalón negro de mezclilla y una mochila que reconozco suya descansa en el escritorio.

El escritorio de los profesores.

¿Ben Jones, es mi profesor de literatura?

Una pequeña sonrisa brota de mi, ajusto mi mochila y camino traviesa adentro.

- Hola profesor - su niñez de Adán sube y baja lentamente, casi siento lo doloroso de fue ese trago de agua.

Me siento cruzando las piernas, mientras mis compañeros llegan y toman sus lugares, él intenta calmarse y pronto inicia la clase, y a pesar de entretenerse leyendo, o haciendo preguntas su vista se dirige constante a donde estoy yo.

Bueno, esto será más divertido de lo que pensé.

(....)

- Los veré el miércoles, señorita Cheryl, espere un momento más por favor - mi bolsa antes en mi hombro la dejo de nuevo en mi mesa, al salir los demás Jones cierra la puerta y camino a él ríendo traviesa

Nuestros labios se encuentran y saboreo la menta que a mitad de clase comió. Delicioso.

- Pequeña, ¿eres mi alumna? - aún está en shock, me sostiene los hombros, yo rodeó su cadera.

- Eso parece, dios me alivia que seas tú

- ¿Por qué?

- Pondré más atención, y te veré más seguido - intento besarlo de nuevo, pero me detiene antes de tocar su rostro de nuevo.

¿Qué?

- ¿Qué tienes? - cuestiono - ¿no te alegra verme?

- No es eso, es que, Cher - me mira indeciso, no me gusta su mirada - Cheryl ahora nuestro trato no debe pasar más allá, para mi trabajo y tu reputación está mal.

Mi ceño se frunce, no entiendo a que se refiere ¿aún teme?

- Por el amor de dios Ben ¿sigues siendo un marica? ¿Qué más da lo que digan los demás? - antes tomaba sus mejillas, pero al acabar la segunda pregunta sus manos me apartan firme y me miran molestos.

- Esto se terminó Cheryl, solo somos vecinos y profesor-alumna. No más allá, entiende que no quiero tener problemas, vine aquí buscando paz, no me la arrebates por favor.

Dejándome con la palabra en la boca camina recogiendo sus cosas, y abriendo finalmente el salón. Se va ignorando mis cara de estupida.

No me gustó cómo me habló, ni me trago sus pretextos, pero si quiere hacerlo interesante puedo jugar tanto como el quiera. Hasta que regrese suplicando por el ataque de celos.

Camino con mis cosas directo a mi  casillero, donde alguien me está esperando, lo sé porque siempre lo hace.

Jones está hablando con un maestro, justo al frente de donde me detengo, así que no lo pienso más y sonrio falsamente emocionada al sensual Moreno de rizos.

Me voltea a ver cuando le hablo por su nombre y entiende la rosa a mi - Qué lindo, gracias.

Su sonrisa incrementa, y toma mi mano cauteloso, pero esta vez no pienso detenerlo.

- Hola preciosa - camino hasta estar casi pegados. Lo que le sorprende - ¿quieres, ir a ver un película, conmigo?

Lo medito un momento, seria dulce una cita así, pero yo no soy así, yo quiero diversión y Mar me la va a dar.

Hago un pequeño puchero antes de responder y sugerir algo mejor.

- ¿Y si mejor vamos a mi casa? Mis pasos no están, será divertido - lo susurro a su oído lo que le excita, un adolescente no es muy discreto con eso.

- Es perfecto, iremos al terminar las clases - asiento fingiendo tanta emoción como él. Y el resto del día lo tengo pegado como garrapata.

Siento sus ojos taladrando mi nuca pero no me detengo, estoy que ardo de furia y de ganas de ser follada, por lo que rodeó su nuca con mis dedos y le doy un beso largo que lo haga desear más.

Si Benjamin quiere jugar sucio, no tengo problemas en hacerlo de dos integrantes. Sin importar el daño que causen mis acciones.

(....)

- Olvidé lo sexy que eres - suspira respirando tan agitado como yo. Toma la sábana y cubre un poco su entrepierna.

Necesito pasar saliva antes de hablar, me dejo un poco agotada, pero no me quejo. Mi desquite fue justo y delicioso.

- Me encanto Mar, ¿por qué no hicimos esto antes? - se ríe envolviendo su brazo en mi cintura, viéndome con ojos brillosos.

Ugh, ya se, por lo enamorado.

- No sé pero me gustaría repetirlo todo el tiempo que quieras. - su mano derecha me acaricia la cintura y después de e hablar un rato la desliza más abajo hasta llegar ahí.

Muerdo el labio tiempo que muevo las caderas al mismo vaivén de sus dedos masturbandome.

- ¿No fue suficiente? - pregunto divertida, jadeando.

Hace un pequeño movimiento que me hace gemir de nuevo, entierro mis uñas en las sábanas y abro más las piernas.

- No me molesta preciosa, tu gozalo - pues tampoco me quejo.

Así que subo gimiendo bien alto, nadie está en casa y no estarán hasta dentro de dos días. Miro a mi amigo a la cara y se distorsiona por el rostro de Ben, así que me dejo ir con más ganas.

- ¡Ah, a... así, más rápido - obedece gruñendo.

Se que se oye afuera todo, y esa es la idea.

Ben, quiero que sepas que me correre en tu honor.

Y que no descansaré, hastabrenerte conmigo de nuevo. No importa cuanto tiempo me tome.

 No importa cuanto tiempo me tome

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Hola! ¿Cómo estás?

¿Me emocioné? Jajaja. Disfruten, que tengo insomnio.

Comenta que te pareció y déjame tu estrellita, por favor.

Gracias por leer, te amo mucho.

Hasta aquí mi reporte,Joaquín.

Sweet Serial Killer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora