AMOR PROHIBIDO

Controlando.

Está Chris con su hermano Alejandro. Están esperando a que sean las 00:00 para ir a las carreras prohibidas.

Chris: Tengo el presentimiento de que hoy pasará algo.

Alejandro: Si, que ganaremos la carrera.

Chris: No, no quiero decir eso. Siento que sucederá algo, como algo nuevo, no se como explicarlo.

Alejandro: No seas tonto tío. Hoy lo que tienes que hacer es concentrarte en conducir bien, como te enseñé.

Chris: Para ti es fácil decirlo, llevas años corriendo. Este es el primer día que conduzco yo y estoy nervioso. No quiero que nadie me presione pero estará todo el mundo mirándome, las tías se me pondrán empalagosas, son todas unas putas las que van allí. Pero bueno para una noche no está mal, ¿no? Jajajajaja.

Alejandro: Que va, está muy pero que muy bien, es más, en una noche pueden haber más de una.

Chris: Sin duda, las carreras serán mejor conmigo.

Casa de Lola:

Shayla: Y bien, ¿cuál es el plan?

Lola: Vamos a vestirnos como unas pilinguis ya sabes, como putitas, y vamos a pasar desapercibidas en la carrera. Total, puede ir toda guarra, cuantas mas mejor para ellos.

Shayla: Pero si te ven...

Lola: Me maquillaré mucho, e intentaré no mirar a los que vayan a correr, pero no creo que Alejandro siga yendo a las carreras, ya es bastante grandecito.

Shayla: ¿Cuantos años tiene ahora?

Lola: Pues cuenta, si nosotras tenemos 16 y yo iba con 11, han pasado 5 años. Él tenía 15 entonces, pues ahora tiene 20.

Shayla: ¿Y con 20 es mayor para correr una carrera?

Lola: Hombre, si los que conducen tienen de 13 a 18 pues sí, jajajaja.

Shayla: Ah vale, entonces tranquila, no creo que esté.

Empezaron a arreglarse. Primero buscaron prendas de vestir llamativas, con lentejuelas, brillantes y esas cosas. Finalmente, Shayla decidió por llevar unos shorts de color blanco super estrechos y cortos con un top de flores dejando ver toda su barriga y el ombligo y unas botas altas rosas; y Lola se puso otros shorts dorados brillantes con un top de color plata y unas botas altas plata también. Se maquillaron mucho y se peinaron. Comieron algo antes de marcharse y a las 23:30 se marcharon hacia Marchito.

Mientras en Marchito...

Chris: Buah hermano estoy que no puedo con los nervios, ¿y si se me va el volante, qué?

Alejandro: Pues tendrás un accidente. Tú procura sacarte estos nervios y gana. Si ganas podrás formar una banda con la gente que te seguirá y también podrás elegir una chica para que esté contigo en cada carrera. Pero haz una buena elección, y no te arrepientas.

Chris: Está bien, intentaré ganar.

En las fábricas abandonadas hay mucha gente esperando a los nuevos corredores de carreras. Este año es gente nueva, ya que hay que renovar cada 5 años. Jazmín y sus amigas están debajo del escenario bailando al ritmo de la música cuando de repente aparecen Lola y Shayla. Shayla coge a Jazmín por el brazo y se la lleva apartada de la gente.

Jazmín: ¿Qué haces aquí?

Shayla: ¿Qué haces tú aquí? ¿Sabes lo que he tenido que pasar por tu culpa? Si no llego a inventarme que te vas a dormir a casa de una amiga, papá y mamá me matan.

Jazmín: Ah vale. Pues...gracias.

Shayla: Estúpida. ¿Cómo se te ocurre venir a aquí?

Jazmín: ¡Cómo se te ocurre a ti! Tu dijiste que jamás pisarías este barrio. Y mírate, aquí estás. Poco falsa y tal...

Shayla: ¡He venido por ti! Eres mi hermana pequeña y me preocupo. No me gusta que estés en este barrio y menos en estas cosas. Si crees que venir aquí te hará bien, estás muy equivocada.

Jazmín: Yo hago lo que quiero, aquí no están ni mamá ni papá para decirme lo que tengo que hacer.

Shayla: Vayámonos a casa. Aquí no tenemos nada que hacer.

En ese momento apareció Lola preocupada y diciendo: Chicas, es algo tarde para irnos. La fiesta ha empezado y las vallas están cerradas.

Shayla: ¿Y ahora qué hacemos?
Lola: Tranquila, todo irá bien. Esperaremos al final y nos iremos al terminar la carrera.

Las 3 volvieron a la fiesta y se metieron entre la gente. Había dos coches en medio de todo el mundo y la gente se puso hacia los lados. En uno de los coches estaba Chris y en el otro estaba Víctor Ramírez, de otra banda. Shayla se puso en primera fila junto a Lola y sin darse cuenta miró hacia el coche de Chris. Él, miró hacia el lado izquierdo y puso su mirada en Shayla. En ese momento hubo un cruce de miradas. Fueron segundos infinitos. Miles de sentimientos y emociones pasaron rápidamente por un hilo imaginario que había entre sus ojos.

Y sonó la bocina que daba el comienzo de la carrera.