p.d: quiero encontrarme

Capítulo 2

  Capítulo 2

Al entrar en el instituto Lucas se queda en la puerta mirándome como entro en mi clase. Al tocar en la puerta de la clase. Veo a una profesora que me mira  me deja sentarme en mi mesa de siempre detrás con mis compañeros. Sin preguntar nada ya que sabe que paso de sus opiniones y quejas

-¿cómo que llegas tan tarde?

me pregunta Samuel un compañero que siempre se aburre si yo no estoy en clase. Como si fuera el payaso de clase. 

No le contesto ya que estar dentro de la clase me viene ganas de dormir. Y más si no te interesan estas signaturas, que Rofaida la profesora no es que digamos un encanto. Pero aun así saco la libreta de apuntes y el libro de matemáticas. Miro a Samuel la página y bostezando. Que pérdida de tiempo.

Veo a todos hablando gritando mientras hacen los ejercicios del libro. Pero yo aquí me siento más perdido. Así que me acuesto en la mesa y apoyo la cabeza en el libro. Al acabar la clases de las dos que tenía me despierto por la alarma de fin de la clase recojo las cosas i me salgo ya a casa.

Estar dentro de casa veo a Lucas cocinando y a mi hermano Nelu mirando su programación infantil. Mientras yo se lo quito para ver las noticias.

-estaba yo.

Me dice quitándome el mando a distancia de mis dedos.

-quita niño.

Le grito empujándolo, se levanta del sofá lleno a la cocina. Como no se va a chivar de ¡mi hermano mayor! Que rabia todos en contra de mi pero que les echo a esta familia. 

Lucas se pone enfrente de la televisión mirándome poniendo la mano a mí para que le dé el mando.

-ahora me toca a mí.

-no, estaba el.

-¡sois asquerosos!

Les grito le ventándome del sofá y tirando el mando al suelo. Que lo recoja el a mí ya me da igual todo me meto en mi habitación cogiendo el portátil de mi hermana Sandra y pongo el internet que tiene de su USB. Así que empiezo a jugar a mi-ni juegos para distraerme.

Al cabo de media hora entra mi hermano Lucas con el cabello despeinado y yo le ignoro.

-cesar, la comida ya está.

Paso de mirarlo, decirle algo estoy muy cabreado apago el portátil. Me voy a la cocina que veo a Nelu comiéndose un plato de macarrones.

Al cabo de comer, otra vez al instituto tengo escalofríos de solo pensarlo.

Al salir de la clase me voy corriendo a casa para pillar la tele antes que el capullo de mi padre.  Pero como la mayoría de veces llego tarde ay esta tumbado en el sofá como si no hay más gente donde sentarse.

- papa me dejas.

-no y vete no te quiero verte.

-va papa solo un rato.

Él se le venta enfadado.

-te dicho que no...- me dice cogiéndome del flequillo del pelo y me da una patada donde más duele.-a ver si así aprendes y pírate.

Estoy más de tres minutos de rodillas aguantándome el dolor. Si pudiera le pegaría o lo mataría una de las dos estoy harto que me trate como si fuera una mierda.

 Cuando se calma un poco el dolor me levanto mirándole con odio.

-mañana vas al peluquero no quiero verte con esos pelos de niña. Que te lo dejen bien corto. ¿Me has oído?

Me dice siguiendo mirando la tele y bebiendo un trago de esa botella que tiene en el suelo que le hace ser insoportable.

-sí.

Le digo salido de casa yendo al sitio donde me siento mejor y protegido en la calle quien diría que estar en la calle no está mal.

Al sentarme en un banco de una cancha de baloncesto veo a unos chavales de mi edad jugando a canastar el balón. En el descaso cada uno miran sus  móviles molones y estos si son amigos de verdad con ropa de marca y  los cabrones son  felices. No como yo que ahora estoy bien pero cuando llegue a casa volveré a estar incómodo.

Al cabo de unas horas a parecen mis colegas y me voy con ellos a jugar a cartas.

-sabéis lo he conseguido Jenny ya estado en mis pantalones como se mueve la pava.

-choradas... vete con Sara esas sí que hace una gran mama...

le contesto a miguel es el chaval que no sabe decir otras cosas sobre que es el placer de verdad Sara sí que es buena en eso lo sé porque ya he experimentado con ella.

-paso es muy pija, tío yo no voy con listillas.

- ¿porque no están a tu alcance?

-¿cómo dices? he a aquí el que solo a conseguido tres en su mierda de vida social.

Me levanto del banco y me pongo enfrente.

-puede que estado con tres contadas pero sabes que yo voy con populares no como tú que son putas.

Tomas se pone en medio de nosotros para intentar calmar la cosa pero sabe muy bien que a miguel tengo unas ganas de partirle la cara.

-te vas de machote con solo catorce añitos y veremos cuando tengas diecisiete perdedor.

Me levanto y me voy a otro sitio paso de capullos.

-¿venís?

Pregunto pero ninguno hace nada así que otra vez solo como no.

Al cansarme de estar en la calle ya empiezo a tener frió uso a casa y veo a mi hermana mirando su portátil.

-¿has tocado mi ordenador?

-sí.

-tiene un virus que te cagas lo vas a pagar tú la reparación.

-echo.

Sabe que no tengo dinero y que no lo voy a reglar.
Al menos Sandra es de las que se enfadan por dentro y no me va a dar la noche  como mis hermanos.

Al coger la consola de mi hermano me siento en ni cama jugando. Mientras ni hermana habla por teléfono.
Qué envidia ya me gustaría tener un móvil. Al menos de tarjeta.
-César, ha aquí tumbado en la cama.
Mi hermana me pasa el móvil.
-¿Si?.
-Oye capullo ¿qué quiere para tu cumpleaños?.
En la voz de oye capullo sé que es mi otro hermano Yunay.
-Un Móvil o un portátil tú eliges.
-No veas hee. 
-Son Mis quince años.
-No puedes ser. Mejor ropa o unas bambas no me viene le presupuesto.
-Tranquilo entre todos.
-Mmmm ya veré. Pásame a Sandra.

Genial mi hermano me comprara mi primer móvil .