Psycho Games [Yoonmin]

ARMY

[Yoongi]

¿Por qué no puedo ir contigo? - Jimin es realmente lindo cuando se molesta.

Necesito encararlos, obtener respuestas, pero es peligroso que todos vayan. Si algo malo pasa, confiamos en ustedes - No pude evitar acariciar su mentón.

-... Y... si todo sale bien, obtendremos un gran aliado - añadí. Jhope y Jungkook insistieron en acompañarme, lo cual agradezco. Con tres será suficiente mientras el resto nos cuida las espaldas desde otro frente.

Ok - No dijo más, lo cual es extraño. Últimamente ha estado muy ausente. He tratado de conversar con él, pero insiste que no hay nada de que preocuparse. Cuando esto termine, me sentaré a hablarle seriamente... Otra vez.

Andando - dije mientras Jhope y Jungkook me seguían.

...

Llegamos al punto de reunión y unas personas de traje nos estaban esperando - Tendremos que cubrir su vista - dijo una mujer de cabellera naranja.

Me temo que eso no es posible - contesté rápidamente, lo cual al parecer fue tomado como amenaza, haciendo que algunos de los hombres del contrario levantaran sus armas y mi equipo respondió de la misma forma.

Disparen y haré que se arrepientan - amenazó Jungkook.

¡Basta! - ordenó aquella mujer mientras indicaba con las manos a sus compañeros que bajaran las armas - No pueden volver a hacer eso JAMÁS EN SU VIDA - no pude entender las intenciones de aquellas últimas palabras.

Al ver nuestras caras de desconfianza, añadió - Si quisiéramos matarlos, ya lo habríamos hecho, Jefe Min Yoongi. Por favor disculpe a mis compañeros - no pude evitar mostrar sorpresa ¿Cómo sabe mi nombre? Y ¿Por qué me llamó "Jefe" tan respectivamente?

Dejamos que nos vendaran y subimos a los autos. De todas formas, el resto de Abraxas nos sigue desde cerca, así que estoy seguro que todo saldrá bien: necesito saber que es lo que está gente sabe.

Tuvimos que cambiar de automóvil dos veces, hasta que por fin llegamos a nuestro destino. Una enorme mansión, llena de las mayores extravagancias... Ellos si que saben vivir como la mafia real.

Nos escoltaron hasta el interior, a una sala de reuniones donde una mujer pelinegra con un elegante atuendo azul se encontraba sentada al final de aquel lugar. Algo me dice que ama la atención.