JW + KM meanie (Minwon)

love You with all

Mingyu estaba sentado en el mueble en medio del casino rodeado de mujeres hermosas y hombres con su mismo gusto peculiar

Comenzo a dar sorbos grandes a la bebida que tenía en mano, mientras una de las chicas se pasaba por encima de él, subiéndose a horcajadas y comenzando a aflojar el nudo de su corbata, destapando su pecho mientras uno a uno los botones eran quitados de la impecable prenda blanca

La mujer comenzó a besar desde su cuello hasta su pecho y procedía a besar su mejilla y justo cuando se atrevía a mirar los labios de Mingyu remojando los suyos con un gesto intimidante y sexy

Mingyu volteo dando un trago a su bebida y dejando de lado la copa comenzó a mirar a la despampanante mujer

—en la boca no, preciosa

Mingyu se paró para llevar a la chica hasta una de las zonas privadas de aquel lugar

—¿tienes un problema con los besos en la boca?

—tengo reglas, a menos que no las respetes entonces vete

—de que hablas qué quieres que haga dime y lo haré

Mingyu era todo un atractivo para la vista de hombre o mujer que lo viera, tenía un porte increíble, un aura elegante y solía vestir con ropa que se ajustaba perfecto a su cuerpo trabajado con colores que resaltaban su aperlada piel, su altura solo le daba más presencia y su mirada errática, cualquier persona sabía que Mingyu era él hombre perfecto

Además de contar con un extenso historial de ser todo un caballero, pero también un hombre feroz en la intimidad

Así que estar con él era una ganancia que no cualquiera podía tener el lujo de darse al ser demasiado selectivo

Nunca había sentimientos de por medio solo era cosa de una noche cada cierto tiempo o simplemente cuando el cuerpo se lo pedía, pero jamás se rendía ante a alguien

Se encontraba demasiado perdido en sus obligaciones en la empresa que pensar en cosas como compromisos solo era un dolor de cabeza y sabía cómo terminaban todas las historias de amor, esto era la vida real donde o se podía ser feliz para siempre o se buscaba una vida digna en base al trabajo y el esfuerzo; Mingyu lo sabia, por eso mantenía esa línea invisible, no importaba que tan cansado se sintiera, la soledad y la depresión desaparecían al tacto de una noche, sin pensar en que a la mañana siguiente se despertaría sintiéndose prácticamente igual de solitario y triste

Pero para la gente se pensaban que era debido a que nadie cautivaba al alto o era realmente selectivo con una pareja, pero lo más seguro era que le gustaba el libertinaje total y no tener que lidiar con los compromisos

—no me beses en la boca y no esperes recibir un solo beso mío en todo este proceso

Sin más Mingyu tomo a la chica sin un sentimiento de por medio, sin una chispa en los ojos, sin mirar abajo

Cuando finalizó, dejó a la chica sentada le dio un trago a su bebida sobre la mesa y comenzó a platicar con ella sobre sus proyectos y lo que la trajo hasta ese lugar

Volteó mirando la hora en su teléfono —perdón, pero es muy tarde fuiste excelente chica

—¿nos volveremos a ver algún día?

—si el destino así lo quiere, tendrás lo que deseas cariño —guiño un ojo y sonrió de lado mientras ponía arreglaba bien su corbata

—estuviste excelente, eres un gran amante

—me lo dicen seguido —Mingyu guiño un ojo y le ofreció la mano a la chica

—¿Quieres que te lleve a tu casa o tomas un taxi?

—tengo mi auto

—entonces te acompaño hasta el

La chica sonrió y se dejó llevar por el alto hasta el estacionamiento

—¿entonces un abrazo de despedida si quiera?

Mingyu la abrazó finalmente la observó sentarse y sonrió para ella, tomó sus llaves y se metió a su auto para comenzar a conducir hasta llegar a su departamento

No había perdido la cordura por ningunos ojos obscuros, tampoco por unos labios que realmente quisiera besar, no era cautivado por las curvas de las chicas, tampoco por sus halagos, estaba orgulloso de si mismo por saber mantener el margen y la situación a su completo control

Lo demás que la gente dijera ya era problema que no le concierne en lo más mínimo, él tenía sus razones y probablemente llegaría así hasta viejo, era lo único de lo que estaba seguro