Citrus: La Marca De La Bestia G!P

Cap 19:

Se escucho algo romperse como el sonido de un globo lleno de agua al ser pinchado con una aguja...

— ¡¡¡¡Aaaaaaah!!!! — el desgarrador grito de Mei hizo sobre saltar a Matsuri.

— ¡¡!Oh Dios oh Dios mío!!! — se horrorizó la demonio al ver como se manchaba el vestido de Mei y la cama en el proceso — No se supone que los bebés nacen a los nueve meses!!!!

Harumin cojio un par de toallas y las puso al pie de la cama, miro a Yuzu pidiendole permiso para asegurarse de limpiar a Mei, pero la rubia estaba aferrada a su chica de tal manera que no veía a su amiga

— Yuzu necesito que... — la mencionada la miro y Harumin le indicó con las manos que tenía que quitarle la ropa interior a Mei, Yuzu lo entendió accediendo al pedido de su amiga — Matsu trae unas tijeras y limpialas con alcohol ya — la demonio empezó a buscar lo nombrado y Mei jadeo hundiendo sus dedos en los brazos de Yuzu.

— Ummmm — Mei tuvo una contracción y Harumin término de quitarle la ropa interior con rapidez

— Ten, ya están limpias — Matsuri le entregó las tijeras y cogió una toalla

Harumin nunca había hecho esto y llevar a Mei a un hospital era muy mala idea y sin la ayuda de Nana, tenía que ser ella quien actuará en esta situación. Le separó con cuidado las piernas a la pelinegra viéndola quejarse de dolor.

— Aaaaah — Mei se contorciono hacia adelante por la segunda contracción — Sacalo ya — chillo dejándose caer nuevamente en el pecho de Yuzu.

Ah dos cuadras.

— No se que hacen ustedes aquí? — dijo Rosie con el seño fruncido

— lo mismo te pregunto? — respondió Himeko de mala gana

— No me interesa a que vienen — dijo Naheyon rodando los ojos — Por que estamos caminando a la misma dirección? — se detuvo abruptamente al cruzar una cuadra que ya conocía

— Bien — Rosie se detuvo en frente de las dos — tengan suerte al llegar a sus destinos — dicho esto se hecho a correr

—¡¡ Hija de puta!!— le dijo Naheyon corriendo tras ella

Himeko las observo unos minutos y se hecho a correr también, esperaba que esas locas no fueran al mismo lugar al que iba ella

5 minutos después las tres chicas estaban afuera del mismo edificio mirándose una a la otra con recelo.

Habitación de Mei.

— Ya casi esta Mei, solo un poco más y saldrá a conocerte — habló Harumin con el sudor escurriendole en la cara

Mei volvió a pujar cuando se escucharon toques en la puerta y Matsuri olfateo a alguien afuera del Departamento, Yuzu la miro de soslayo y gruño poniéndole los pelos de punta. La demonio se acercó rápidamente a Harumin con la toalla

— ¡¡Aaah!! — fue el grito de Mei antes de escuchar un pequeño llanto, su pecho subía y bajaba con violencia, se quizo reincorporar pero Yuzu no la dejó y aparte se quejó de dolor — quiero.... Verlo — se dirigió a su chica

Harumin corto el cordón umbilical y le paso el bebé a Matsuri manteniendo cada tijera precionada en los extremos cortados, cogió un encendedor con nerviosismo y empezó a quemar la punta que estaba unida a Mei haciendo que está se quejará por unos momentos — listo — dijo Harumin con una sonrisa.

Matsuri limpiaba la sangre del bebé que soltaba pequeños lloriqueas, se acercó a Mei que la miraba sonnolienta pero que mostro una sonrisa al ver el bulto que cargaba Matsuri envuelto en una toalla.

Algo se callo y todas miraron a Harumin — Alguien a entrado — les dijo

Ignorando esto Matsuri le pasó el bebé a Mei — Es niña — le dijo sonriendo para luego girarse hacia la puerta y desaparecer por está.

Yuzu no se iba a separar de Mei y las chicas lo sabían así que Harumin se posicionó aún lado de la puerta, iba a degollar a quien se atreviera a cruzarla.

La bebé había dejado de llorar y abría sus pequeños ojitos, su madre le acarició sus rosaditas y regorditas mejillas. Yuzu solo las observo por unos instantes y luego hizo lo mismo que estaba haciendo Mei, acariciar a su hija. Tan pequeña y frágil, ahora no sólo tenía un motivo que proteger, tenía dos y daría la vida por ellas.

La puerta se abrió estrepitosamente asustando a la bebé que solto el llanto, Mei no quizo mirar quien había entrado ya que su mayor objetivo era calmar a su bebé.

Harumin había agarrado al intruso por el cuello pero tan rápido como lo hizo lo soltó — Pero que mierda — Harumin miro detrás de está y vio a Matsuri encogiendose de hombros — Que hacen aquí? — les pregunto con cizaña

— Oh Dios mío — Rosie quizo acercarse a Mei pero una mano la detuvo y esta miro mal a Matsuri — sueltame — le dijo entre dientes

— Si lo hago lo más probable es que Yuzu te mate antes de dar dos pasos hacia adelante — le dijo sin importancia

— Alguien me puede explicar que demonios es esto?!!! — todas miraron a Himeko a excepción de Yuzu que estaba observando a su hija pestañear — Mei Mei tú — se detuvo un segundo — Por que no la llevaron a un hospital!! — se alteró

— Por que son bestias — susurro Naheyon captando la atención de Yuzu quien la miro frunciendo el ceño y en un chasquido la tenía contra la pared — sue.. Suel

— Aaaaaaaaaaaaaah — ese fue el aterrador grito de Himeko

— Dame una razón para no matarte — Yuzu le susurro a Naheyon en el oído.

— No soy el enemigo — le dijo Naheyon — Te lo prometo — le suplicó con temor

— Yuzu mira — esa había sido la melodiosa voz de Mei, la Rubia giro su cabeza con rapidez mirando la sonrisa que tenía su chica al estar amamantando a su hija.

Las demás suspiraron cuando Yuzu solto a Naheyon y esta callo al suelo sobandose el cuello.

— Vallamos a la Sala — habló harumin soltando un suspiro cansado — Hay mucho de que hablar..

Todas comenzaron a salir y Matsuri fue la última en mirar a Yuzu y Mei antes de cerrar la puerta y seguir a las demás a la sala.

Esta iba hacer una charla muy larga.

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Me costo un poco introducir a las demás chicas y que no salieran en partes 🤭

Saludos mis pequeños lectores

Espero les guste este regalito 🙈