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ℙ𝕖𝕣𝕤𝕠𝕟𝕒𝕛𝕖: Mario Calderón
ℂ𝕒𝕥𝕖𝕘𝕠𝕣𝕚́𝕒: One-Shot
𝔸𝕕𝕧𝕖𝕣𝕥𝕖𝕟𝕔𝕚𝕒: Ninguna
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Acabó el día en Bogotá lo que significaba una noche de cacería para el par de casanovas de ecomoda Mario Calderón y Armando Mendoza a pesar del compromiso moral que mantenía el último mencionado con su novia Marcela Valencia para los compinches no era tomado enserio sobre todo Mario Calderón para él su amigo seguía soltero y a la orden de las mujeres.Se encontraban en una discoteca dónde se cotizaban una de las bellezas de Bogotá, cosa que ponía loco a Mario.
—Hermano, hemos encontrado el santo grial para unos tipos como nosotros —Exclamó Calderón a su amigo.
—No y eso no es nada hermano, vea la cosita que acaba de llegar —Los ojos de Mario Calderón se posaron sobre aquella hermosa silueta que había recién entrado al bar. Quedó perplejo ante lo que veía una perfecta 60-90-60 que se baja de un Lamborghini con unas piernas de infarto y una cabellera para morirse. El sueño de cualquier hombre.
—Me disculpa pero aquí nuestros caminos se separa querido presidente —Mario dio un toque al hombro de su amigo quien sabía que un hombre como él no perdería el tiempo con semejante belleza, dispuso a coquetear en otra parte sin escapar de la vista de su amigo. En cuanto a Calderón quién sólo podía admirar la espalda de su presa decidió acercarse sorpresivamente hacia ella aplicando una de sus técnicas magistrales.
—¡Camila que sorpresa! —Abrazó por detrás a la hermosa figura.
—Amigo disculpa te equivocaste de persona —Calderón iba morirse por aquella chica, sus labios, sus ojos era algo que él nunca olvidaría.
—Lo siento mucho, espero a mi prima —Detallo de pies a cabeza a quién tenía en frente- ¿Viniste sola?
—Si, si, quería conocer Bogotá y que mejor que sus lugares nocturnos —Ella le dedicó una sonrisa que provocó una pequeña corriente eléctrica en los sentidos del contrario.
—¿No eres de Colombia verdad? tu acento me dice que eres de otro lado.
—Venezuela, soy venezolana —Eso encantaba a Mario aún más.
—Mientras llega mi prima ¿que te parece un trago? —Paso su mano por la cintura de ella dirigiéndola a la barra.
Empezó el coqueteo y las caricias disimuladas, tanta química era imperdible para los espectadores al cabo de unas horas entre tragos se encaminaron al hotel donde se hospedaba la chica.
Al estar ahí con esa belleza Mario estaba perdido. Los besos y leves roces enloquecían tanto a la chica cuyo nombre era un misterio para Calderón.
—Antes de seguir, quiero saber tu nombre pues creo que me enamoré —Pasó un mechón de cabello de la chica para detrás de la oreja de esta, quien solo sonrío y clavando su mirada en la del contrario.
—___ mi nombre es, ___—Besó levemente la comisura de los labios del contrario con mucha ternura, luces se apagaron y con esto la situación se calentó un poco.
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Sintió la ausencia de su acompañante en medio de su sueño, le extraño pues usualmente era él quien escapaba en la mañana ésto lo dejó pensativo pero no tenía tiempo que perder.
