𝑷𝑨𝑹𝑨𝑺𝑶𝑴𝑵𝑰𝑨 ㅡ Jaedo

002┊𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐨𝐬

Vamos, sólo toca la puerta. Sólo toca la puerta. Sólo es Jaehyun, que una noche de sexo no cambie nada. O por lo menos no mucho. ¿Cuántas posibilidades hay de que Jaehyun no me quiera explicar? No muchas. Supongo.

Bien.

Alcé mi brazo para así tocar la puerta de la casa, esperando por alguna respuesta. ¿Cómo se supone que deba actuar ahora? me parece imposible que actúe normal, es decir como siempre, porque... bueno, tuvimos sexo, eso no es normal. Tal vez deba actuar neutral, o enojado... ¿enojado neutral? un punto medio, sí. Le reclamaré y lo odiaré por el momento, después esperaré a que las cosas se relajen un poco. Aunque no estoy seguro de que forma las cosas podrían relajarse, la friendzone nunca fue lo mío. A duras penas conseguía citas, chicas, claro. Los hombres en la vida me habían pasado por la mente. Hasta... hasta que pasó, lo que pasó. Eso, sí.

Dejé mis pensamientos cuando la puerta se abrió y Jaehyun apareció frente a mi. ¿Por qué hasta ahora es que noto lo atractivo que es?... ah sí, soy gay desde aquella noche, ya lo recordé.

ㅡ Hola, Doyoung... ㅡ Jaehyun se volvió, dejándome pasar, para cerrar la puerta detrás de mí. Miré a mi alrededor, buscando a su hermana, o alguna señal de su mamá, o cualquier persona, pero al parecer no había nadie.

ㅡ¿Estás solo?... ㅡ inquirí cauteloso. Jaehyun alzó una ceja con con sonrisa.

ㅡ Sí... ㅡ contestó, casi en un tono interrogativo. Bien, es el momento.

ㅡ ¡Eres un puto enfermo!, ¿por qué dejaste que, hiciéramos, eso que... no hacen los amigos, imbécil... eres, somos... tú... ㅡ debí haber ordenado mejor mis ideas antes de abrir la boca. Oh, es que las cosas suenan tan bien cuando las pienso en mi cabeza, y al momento de decirlas, todo es tan mierda.

Jaehyun alzó sus manos en señal de que me detuviera.

ㅡ Tú también pudiste detenerlo... y no lo hiciste ㅡ se defendió.

ㅡ ¡Era de noche, pensé que eras un ladrón, no tenía saldo, tu debías morir primero, gemías “Doyoung”, llegaste al cuarto y me atacaste! ¡no sabía cómo!... ㅡ Jaehyun entrecerró sus ojos y se cruzó de brazos con una sonrisa. Pareciera que la situación lo divertía.

ㅡ ¿Qué tal?... me refería a Seo Doyoung, no a ti, Kim...

¿Qué?

¿Seo? ¿el teñido de rojo, enano, feo, con problemas de pronunciación? ¡soy mejor que eso! sí, a veces me trabo igual, y digo estupideces, pero, vamos...

ㅡ Estás de broma, era yo, ¿no? ¿cómo Seo? ¡joder, soy mejor!

Jaehyun rió.

ㅡ ¿Por qué te importa si me lo estás reclamando?

ㅡ Porque... ㅡ suspiré, reconociendo que discutir el “a qué Doyoung se refería mientras se masturbaba” era algo estúpido y que me dejaría como un celoso. No estoy celoso, sólo soy mejor. Fácilmente es a mi a quien se refería. No al otro teñido... por favor, ¿qué hombre se tiñe de rojo? yo no, soy más natural. Negro nadie sospecha. Era yo. Obvio. ㅡdéjalo, el punto es que... estuvo mal, Jaehyun.

ㅡ En realidad estuvo muy bien...

ㅡ Sí, pero... ¡no!, no estuvo bien, y no me dices nada de tu enfermedad, o eso que tienes... y, además, ¿ahora qué?... ¿seguiremos igual?... como amigos de toda la vida, o como extraños amantes en las noches, ¿como hombres lobo o algo así?... ㅡ Jaehyun me miró confundido.

ㅡ ¿Hombres lobo...?

ㅡ Sí, ya sabes. De día unos y de noche otros, es metafórico.

ㅡ Sería más como vampiros...