Capitulo #16: Las Flores Florecerán Pronto.

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El caballero le dijo a Calian.

"La reunión se ha extendido y la familia real todavía no está en el salón de baile".

Parecía que Rumein había ayudado a Calian. Calian asintió sutilmente.

Luego olió el Ranieri cuando abrió la puerta y sonrió.

Las únicas personas que no asistieron a la reunión real y al mismo tiempo fueron invitadas a la fiesta fueron Silike y Calian. Como se trataba de una fiesta que comenzaba justo después de que terminaba la reunión real, comenzaría tarde si la reunión terminaba tarde.

Así fue como Calian consiguió algo de tiempo para hablar con Silike, solo.

Un criado se acercó y dejó una taza de café. Dijo Calian.

"Por favor, danos un poco de espacio antes de que vengan los demás".

El sirviente asintió y todos los demás se fueron.

Silike miró fijamente a todos que se iban ya que no sabía lo que estaba pasando y se abanicó como de costumbre.

Calian, al ver eso, negó con la cabeza.

"No nos engañemos".

Al oír esas palabras, Silike se quedó paralizada por un segundo. Luego, asintió y dejó el abanico sobre la mesa.

"Cosa segura."

Tanto Calian como Silike se miraban el uno al otro. Aunque ambos parecían tranquilos, en realidad no lo estaban. Un silencio abrumador estalló en toda la habitación. El segundero del reloj marcando dentro del salón de baile sonó como un trueno.

Silike habló primero.

"¿Por qué me miras así?"

Calian frunció el ceño levemente y sostuvo una taza de café en sus manos.

"Te dije que no me engañaras".

Los ojos rojos de Calian se apartaron de Silike y ahora miraron el café.

"Pero eso no significa que debamos deshacernos de nuestro respeto".

De repente, la expresión facial de Silike cambió.

Debido a que Calian era de sangre real, Silike no debería haber eliminado su respeto. Calian estaba hablando de eso.

"Has crecido mucho".

Silike todavía no mostraba respeto.

Calian, habiendo bebido su café tranquilamente, sonrió y habló.

"Eso no es difícil de hacer ... ¿verdad?"

Luego añadió con una voz profunda.

"Silike".

El hermoso rostro de Silike mostró enfado. Calian se sorprendió al ver eso y Silike se mordió los labios.

"Los malos linajes son tan irrespetuosos ..."

"Creo que te acabo de decir que no estás mostrando respeto".

Calian, después de cortar las palabras de Silike, habló de nuevo.

"Si hablas de linaje, ¿qué pasa con el vizconde Brissen?"

Los ojos de Silike se volvieron delgados y afilados. Lo estaba haciendo porque sabía que no podía deshacerse de Calian en ese momento.

"De todos modos, hay algo de lo que quiero hablar, Silike".

Silike, que volvió a llamarla por su nombre, no tenía ganas de hablar con Calian. Por eso se puso de pie.

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