Hazbin hotel: eres mi luz al final del túnel.

Capítulo 1. Una semana no tan cualquiera

Ha pasado una semana desde que inicio la propuesta de Charlie para solucionar el conflicto de Ángel y Vaggie, la situación es bastante tensa entre los dos, siendo que ha estado cerca de pelearse, pero debido a la constante vigilancia en la que están se logra evitar, la convivencia no era todo el día sino en los tiempos libres que cada uno tenía, para mala suerte y/o buena suerte dependiendo del punto de vista esta semana era diferente de las normales, para Ángel los trabajos habían vuelto a la duración normal, aunque convivir con Vaggie no le gustaba demasiado pero prefería eso que tener que estar más tiempo con Valentino, en cambio Vaggie tenía menos carga de trabajo de lo habitual, al parecer alguien metió mano para que ella tuviera más tiempo libre, sus sospechas están en Charlie pero no encontró indicios de que fuera ella.

El día de hoy no era diferente del resto de la semana, Vaggie y Charlie estaban en la oficina estaba revisando las cartas y el correo del día de hoy, Vaggie buscaban si había algún pecador que deseaba reformarse, pero como la mayoría de las cartas eran como el caso de los comentarios en la página oficial del hotel solo con el añadido especial de pedidos de servicios sexuales a Ángel entre otras cosas, mientras ella revisaba las cartas Charlie revisa las facturaciones del hotel.

— ¿Ha habido algo de suerte Vaggie? —dijo Charlie, mientras hacía las cuentas del hotel.

—No, son las mismas de siempre. —Revisa cada una de las cartas.

—Supongo que no hemos tenido suerte el día de hoy —dijo con cierta tristeza, seguía revisando los recibos, ambas escuchan que la puerta de la oficina se abre, voltean a mirar al intruso siendo que era Ángel.

—Ángel, ¿Qué se te ofrece? —dijo Charlie, Vaggie suspira con molestia

—Nada solo vengo a "trabajar" en mi relación con la tuerta, oh perdone señorita vagina. — Ángel trataba de contener su risa, Charlie estaba decepcionada y molesta, Vaggie mira enojada a Ángel y antes de hacer una acción imprudente decide no actuar, Ángel estaba al borde de hablar para otra broma, pero fue interrumpido por Charlie.

—Ángel ya discutimos esto y por favor no más bromas —dijo en un tono serio, Ángel suspira de aburrimiento, el ambiente se tranquiliza un poco Vaggie suspira de cansancio vuelve a la labor que estaba haciendo.

—Está bien, aguafiestas —dijo Ángel con molestia y susurra las últimas palabras, se queda cerca de un de los buros que contenían una pequeña pila de cartas abiertas, por curiosidad tomo una, ve para quien estaba destinada.

—El chulo de fresa, ¿aún sigue recibiendo estas cartas? —dijo con incredulidad.

—Sí y parece ser que han estado aumentado últimamente —dijo Charlie con cierta preocupación mientras seguía mirando los recibos

—Y cada vez son más extraños desde fantasías hasta propuestas de matrimonio y entra muchas cosas más —dijo Vaggie con cierta perturbación en su voz, haciendo que le dé un escalofrío por recordar esas raras cartas.

—Definitivamente, tienes razón enana —dijo Ángel con disgusto al leer una de las cartas y la deja en su lugar.

—Esas cartas definitivamente están a otro nivel —dijo Ángel con disgusto.

—Y creía que tú eras un pervertido—dijo Vaggie con ciertas dudas.

—Bueno cariño una cosa es que tengas sexo por dinero, pero eso está fuera de mi propia liga —dijo afirmando su punto.

—Y hablando de esto no ¿habrán mandado otro de esas raros escritos a Alastor? —dijo Ángel

—Por suerte ya no han mandado otro de esos, si no me equivoco, Charlie ¿uno de esos no era de esas raras historias que hicieron sobre Alastor?, no —dijo Vaggie.