A B S O L U T I O N

HALE

Derek respiró profundamente mientras trataba de arreglar el nudo de la corbata verde que llevaba puesta en ese momento.

- ¿Nervioso? – la voz de Stiles lo hizo darse vuelta para mirar al castaño quien estaba acompañado por su marido.

-Mucho – admitió el lobo con una sonrisa tensa.

-Te trajimos un regalo, esperamos que te guste – susurró el agente del FBI acercándose un poco para entregarle una caja de gran tamaño.

El lobo miró el cuadro que Stiles y Theo le habían regalado. Ver a toda su familia en una imagen era una de las mejores cosas que le había pasado después de perderlo todo por culpa de Kate.

-Mi papá nos ayudó a encontrarla, creo que la tomaron el día que Laura se graduó de la preparatoria ¿No? Peter dijo que fue uno de esos pocos días en los que salieron todos juntos – el humano sonrío – casi no entran en la foto.

-Éramos muchos – susurró el lobo con la voz tomada.

-Y todos ellos deben estar orgullosos de ti Derek, has pasado por un infierno, has cometido muchos errores pero has logrado perdonarte por ellos y avanzar – Theo se acercó al lobo para abrazarlo – estás a punto de dar el SI para pasar el resto de tu vida con un hombre que te ama y junto a tus hijos, conozco la historia de los Hale y puedo asegurarte de que ellos deben estar felices por ti.

-¿Derek? – los lobos se separaron cuando Peter ingresó a la habitación – sé que por lo general es la novia quien debe llevar algo nuevo, algo prestado, azul y usado pero los hombres Hale siempre hemos sido un poco "divas" y por suerte nuestras reliquias familiares las hemos guardado en la bóveda – el mayor de los Hale se acercó a su sobrino – sé que hemos tenido nuestros problemas pero quiero que sepas que me siento agradecido por ser capaz de compartir este momento contigo – Peter sacó una caja del bolsillo interno de su chaqueta – este es el broche que todos los hombres de la familia hemos usado cuando caminamos por el altar para unirnos a la persona que amamos – explicó – el primero en usarlo fue el abuelo de mi abuelo y ha estado en nuestra familia desde entonces – Derek miró el broche con curiosidad – es la mitad de un triskel y es porque la otra mitad la tiene tu pareja – aclaró Peter – Se lo di a Chris para que él se lo entregara, ya sabes, es como un hijo para él.

Peter se acercó aún más a su sobrino hasta que estuvo a menos de medio metro de él.

-Va en tu corbata, de esa forma se unirá a la otra mitad cuando llegue el momento del beso – explicó mientras tomaba la corbata de Derek y lo enganchaba justo en la mitad.

-Gracias tío, por todo – susurró el moreno antes de abrazar a Peter como no la hacía desde que era un niño pequeño y creía que era tan genial como un superhéroe.

-Te quiero sobrino y quiero que seas feliz – respondió el lobo con sinceridad. Derek, Cora y Malia era la única familia de sangre que le quedaba y estaba harto de las peleas estúpidas que habían tenido por años, era momento de dejar eso atrás.

Un suave golpe en la puerta hizo que ambos Hale se separan.

- ¿Se puede? – Cora Hale estaba parada en la puerta, vestida con un hermoso vestido de dos piezas y de colores brillantes. Incluso tenía el pelo corto. Se veía tan sexy y femenina que los tres hombres en la habitación que la conocían tardaron en reaccionar.

Theo se preguntó quién era ella y porque había dejado mudo a su esposo, a su suegro y a Derek.

Stiles por su parte no podía creer que esa chica que tenía enfrente, esa misma que llevaba puesto un top y una falda, junto a unos tacones realmente altos y que se veían peligrosos, fuera la misma chica enojada que él había conocido años atrás. Cora sostenía su cartera de una forma tan elegante y suave que parecía que aquella que había peleado a muerte con Ennis y Kali era otra persona.