Moonlight Children

War is coming

Las imágenes iban y venían en la mente de Wei Ying, las fauces del lobo, rasgando su piel, el dolor punzante y la sangre brotando de la herida. Los gritos, gruñidos y el sonido de las espadas, se oían todos muy lejanos. Podía sentir el olor a humo y oír el crujido de las llamas, como un susurro que lo único que anunciaba era caos. Entre esas imágenes apareció su Madre, luchando feroz para proteger a su alfa. Su madre era una de las Omegas más fuertes de la cofradía, como no serlo si tenía la sangre de Baoshan SanRen corriendo por sus venas, ambas Omegas dominantes, fuertes, decididas. Siempre fueron su ejemplo para luchar por lo que creía. Aunque su madre hubiera estado bajo la sombra del error de su abuela, aún así los ancianos la respetaban. Y eso se debía a que su padre nunca la había hecho de menos. El nuevo reino lo habían construido juntos, pero nunca hubieran esperado un ataque así. La imagen de su madre siendo atacada y verla caer con la bestia sobre ella. Y ver la desesperación de su padre que puso su propio cuerpo como escudo para protegerla. Esa imagen lo asaltó, la sangre y las fauces del lobo, lo despertaron. Trató de levantarse, pero no pudo. Le dolía todo el cuerpo, se lamentó cuando sintió la punzada en su hombro, y aún no podía ver bien, solo veía sombras moverse de un lado al otro y un bullicio que ensordecía. Trato de enfocar su mirada en un punto e intentó sentarse, pero sintió como unas manos lo recostaban de nuevo.

"Joven maestro, no...no se levante... sus...sus...heridas aún no están bien..." la voz suave y tranquila de Wen Ning, era un pequeño bálsamo en todo el caos.

"W..Wen...Ning?"

"Si joven maestro..."

"Dón...dónde estoy?" la garganta lee dolía al hablar, su voz salía rasposa y apenas podía tragar saliva, quería decir más cosas pero nada salía, el bullicio era cada vez más fuerte y entre medio empezó a oir llantos. Sintió las manos de Wen Ning, sobre la herida, y como empezó arder nuevamente luego de que me pusiera un ungüento.

"Esta en el área de enfermería...joven maestro. Todos los heridos están aquí en el subsuelo. Jano ya ilumina todo el palacio, sólo los soldados betas y humanos están trabajando en la superficie, tratando de poner el Palacio en orden." Mientras le explicaba, lo que sucedía, iba limpiando su herida. "la mitad del domo se quemó en el incendio de anoche, todos los ventanales están destruidos." El seguía hablando y Wei Ying comenzó a cerrar los ojos, tratando de recordar cada detalle de lo que había sucedido la noche anterior. ¿Cómo no lo vieron venir?, ¿Cómo se metieron al palacio?. De repente la imagen de los ojos de esos lycans vino a su mente. La negrusca imagen de esos ojos, vacíos y sin vida, pero llenos de ira. No eran lycans comunes, nunca los habían visto antes. En eso recordó a Lan Zhan, pero el no parecía ser parte de ellos. El luchó contra ellos, el lo defendió. Pero nadie lo conoce, no le iba a creer. Su presencia allí esa noche, lo volvía un sospechoso también. Abrió sus ojos nuevamente, tenía que levantarse. Tenía que ir a ver como estaban sus padres.

"Mis...mis... padres...Wen Ning, ¿cómo están mis padres?

"Joven maestro.... yo...yo..."

"Wen Ning..." trató de levantarse, y esta vez fue Wen Qing, quien lo detuvo. Le quitó el apósito a Wen Ning y comenzó ella a limpiar la herida.

"Wen Qing".

"Wen Ning ve a ver a los otros heridos...."

"Wen Qing..."

"No hables... te vas a cansar más y necesitas recuperarte rápido, aún tienes un poco de fiebre."

"Mis...pa..padres." Ella se mantenía en silencio, pero podía ver en sus ojos que había preocupación y pena. Respiró hondo y finalmente contestó.