Como debería comenzar esta historia? Ya se por cuando conocí a una curiosa niña que se adentro a bosque donde me encontraba durmiendo.
Era un día como cualquier otro, yo escapando de los otros dragones para acercarme al bosque que rodeaba la ciudad de Fiore, tenía un extraño interés por como eran los humanos, pero debía mantenerlo en secreto ya que los dragones tenían prohibido tener cualquier tipo de contacto con ellos.
Nosotros no existimos para nada mas ni nada menos que juzgar a la humanidad y por ende no teníamos la nesecidad de conocerlo, pero yo desobedesia aquella regla, y cada vez que se me daba la oportunidad de escapar la tomaba, sin dudarlo. Y cada vez que hiba asia ese frondoso bosque capaz de esconder a un dragon, soñaba con la paz que talvez algún día gobernara o que tan solo fuera mi deseo egoísta, un tiempo donde los humanos y los dragones coexistan en paz.
Pero un ruido me desperto , sacanmdome de mi sueño, buscando al causante para volver a dormir y caer en los brazos de Morfeo, pero una pequeña figura me sorprendí, no era un animal, ni un ave, era nada mas que esa criatura de ojos marrones, pelo dorado y una delicada figura, que al encontrarse con mis ojos quedó perpleja, inmóvil, pero en sus ojos no se reflejaba temor sino que curiocidad y cuando su cuerpo reacciono, ella abansaba segura a mi.
Cuando estuvo a una distancia corta ella me pregunto sin tartamudear, sin balbuciar y con mucha seguridad.
-Eres un dragón?-
-Si, porque lo preguntas debería ser bastante obvio-